El Centro de Normalización Lingüística (CNL) no es simplemente un lugar donde aprender catalán. ¿Cómo lo definiría?
Los 22 Centros de Normalización Lingüística de toda Cataluña tienen encomendadas una serie de tareas, la más conocida de las cuales son los cursos de catalán para adultos. Aparte de esto, también nos dedicamos a realizar tareas de asesoramiento a las administraciones locales, sobre todo con los temas de selección de personal -que es un trabajo muy técnico-, como también realizamos campañas de difusión o de promoción de la lengua catalana. Hacemos campañas con el comercio y campañas temporales –como la campaña de Navidad-. Por otro lado, realizamos la atención directa, a través de los cursos de catalán. El CNL de Tarragona lleva 11 servicios de catalán y tenemos que atender a mucha población, y muy dispersa.
Como comenta, también trabajan con empresas. ¿Cuál es la situación del catalán en las empresas?
Hay empresas que sí que tienen una responsabilidad social con la lengua e intentan que el catalán esté siempre presente, aunque en un contexto multilingüe, es decir, no se pide nunca el uso exclusivo del catalán. Pero, dentro de este contexto multilingüe, lo que nosotros trabajamos con las empresas es que tengan el catalán como una lengua más para que los consumidores que utilizan el catalán como primera lengua puedan ser atendidos también en catalán. A veces, se tiende a pensar que queremos que las empresas solo hablen o trabajen en catalán. El contexto no es este.
Hablemos pues de un uso igualitario de la lengua catalana en el marco de las empresas.
Exactamente. Que las personas que quieran ser atendidas en catalán lo puedan ser sin ningún problema. Por eso hacemos campañas de difusión, para que la gente entienda que el catalán se puede utilizar en el mundo comercial como cualquier otra. Esperamos que en poco tiempo haya resultados.
Por otro lado, existe la atención oral directa en los establecimientos. Aquí es donde nos hemos encontrado una gran diferencia, en Tarragona ciudad, entre la lengua que se utiliza y la lengua que se podría utilizar. Es decir, la gente, por defecto, habla en castellano cuando entra en un lugar público. Pero, también se ha detectado que si te mantienes en la lengua catalana, la otra persona te puede contestar en catalán, porque seguramente será catalanohablante. Queremos que la gente se acostumbre a hablar en catalán en público, si no hay ningún problema y la otra persona también habla esta lengua.
¿Qué cursos se pueden cursar en el CNL?Hacemos todos los niveles previstos. Empezamos por el nivel inicial, que va incluso antes del primer nivel. Se hacen sesiones de nivel inicial sobre todo para las personas que acaban de llegar y no lo entienden. Después tenemos el primer nivel regulado del cual se puede obtener un certificado oficial, que es el Básico 3 (B3). El siguiente nivel es el elemental, que es también para no catalanohablantes de origen, pero que ya tienen unas estructuras básicas. De este nivel elemental ya se pasa al nivel intermedio, con estudios de gramática, del intermedio se pasa al de suficiencia (nivel C) y después al superior (nivel C2). Respecto a los cursos, son modulares de 45 horas. Para poder examinarse, se deben realizar los tres módulos que corresponden a cada nivel. Pero, antes de empezar se realiza la prueba de nivel y, por tanto, depende de la situación de inicio de cada persona.
Cabe puntualizar que, respecto a la formación para alcanzar el nivel C2, estamos realizando cursos presenciales que son de 90 horas, intensivos, y quedan un poco fuera del funcionamiento del resto de cursos. También realizamos otro curso en línea del nivel Superior, que se alarga durante todo el año (de septiembre a junio), y está destinado a personas que tienen muy poco tiempo y no pueden venir a las clases. En términos generales, el resto de cursos son trimestrales. Actualmente, estamos muy centrados en los cursos de nivel inicial y básico porque ha venido mucha gente.
¿Son los que tienen una mayor demanda?Sí, ahora sí. Sobre todo el nivel básico porque está llegando mucha gente.
¿Qué perfil de gente llega?
Principalmente, mucha gente de Sudamérica y del norte de África, sobre todo, del Magreb. Hablamos de los últimos meses, desde el mes de septiembre. Ya lo notamos hace un par de años un poco, el año pasado ya fue muy fuerte y este año es fortísimo. De tal manera que hemos tenido que desviar cursos hacia el nivel básico para poder atender a toda esta gente porque tenemos listas de espera largas y no nos gusta tenerlas. Queremos que la gente pueda integrarse.
También disponen de algunas bonificaciones en situaciones concretas...Sí, principalmente para las personas desempleadas, que tienen una reducción de la matrícula de un 70%. También hay bonificaciones para familias numerosas y monoparentales, para jubilados, discapacitados y pensionistas, entre el 50% y el 70%. El único curso que no tiene ningún tipo de exención es el nivel Superior porque se queda un poco fuera de lo que es la normalización lingüística y es más bien perfeccionamiento. También hay que puntualizar que los certificados no se pagan. Una vez finalizado el curso, se realiza el examen y posteriormente se debe realizar el trámite, que llega a través de correo electrónico, para recibir el certificado.
¿Qué diferencia el CNL de cualquier otra academia que imparta clases de catalán?Trabajamos para las administraciones locales y sobre todo para el departamento de Servicios Sociales, por lo tanto, ya recibimos una parte de gente que no sé si podrían pagar una academia. En este sentido, nosotros formamos parte de la administración y por eso trabajamos como consorcio y los títulos que damos son oficiales y homologados. Las academias hacen un trabajo muy importante, pero trabajan de forma privada y están destinadas a otro tipo de público. Además, forma parte de nuestra misión atender a todas estas personas. Durante estos últimos años, que ha habido una inmigración fuertísima que ha cambiado la estructura social de Cataluña, nos dedicamos a atender y formar a esta gente que llega. Estamos muy acostumbrados a trabajar con personas que llegan y quieren integrarse.
Es decir, el CNL desarrolla una tarea social, más allá de la docencia y formación.Totalmente, porque una persona que acaba de llegar tiene otras prioridades y nosotros nos encargamos de que estas personas puedan desarrollar su actividad social, personal y familiar sin ningún tipo de problema. Hemos trabajado con personas refugiadas y también con los adolescentes que llegan solos y sin familia, aunque no son nuestro público, ya que son menores, pero ante una urgencia social hacemos lo que convenga.
¿Cuál es la predisposición de estas personas para aprender catalán?
En principio, no tienen una mala predisposición. En general, son personas con ganas de vivir tranquilos y en paz.
La filosofía de formación del CNL se centra mucho en la práctica, por eso existe también el Voluntariado x la Lengua. ¿Puede concretar en qué consiste esta iniciativa?
Tenemos un grupo de voluntarios que hacen una tarea de cohesión muy bonita, ya que dan su tiempo y ayudan a nuestros alumnos para que hagan prácticas en catalán en situaciones de la vida real. Por lo tanto, se crean las parejas lingüísticas entre los alumnos y los voluntarios y van a pasear, a comprar, a hacer trámites, de manera que los alumnos lo puedan hacer en catalán. También hemos organizado una serie de prácticas lingüísticas con los comercios para que atiendan a nuestros alumnos en catalán. Durante el curso pasado hicimos más de 1.000 prácticas lingüísticas y este año vamos por el camino de volver a repetirlo.
Por lo que explica, parece que es una iniciativa que tiene mucha acogida.
El año pasado hicimos más de 550 parejas en el área de Tarragona, que se traduce en unas 1.150 personas participantes entre voluntarios y aprendices. Este año, esperamos estar entorno a estas cifras.