Reus quiere proyectar el entorno del aeropuerto, con el Aeroclub y el Cesda, la escuela de pilotos, como pilares, y promocionarlo bajo el paraguas de parque aeronáutico. Esta nueva marca recogerá servicios ya existentes -en el ámbito de la formación, mecánica, ocio o incluso fotografía aérea-, si bien son bastante desconocidos para la ciudadanía en general.
El Ayuntamiento cree en el potencial del espacio, con un aeroclub que tiene la particularidad de una gran pista de 2,4 kilómetros y la disponibilidad de suelo industrial de gestión privada con acceso a la pista. Fundado en 1932, el aeroclub, que cuenta con 250 socios, ha pasado por malos momentos hasta el punto de que peligraba su continuidad. Ahora tiene ocupada toda la capacidad de los hangares -alquilados a varias empresas- y, en proyecto, la construcción de dos hangares más.
El Ayuntamiento quiere aprovechar el momento dulce que vive el sector y sacarle el máximo partido. Por eso ha encargado un plan estratégico para impulsar el parque aeronáutico y aplicarlo el año que viene.
