El diputado del PDeCAT por Lleida en el Congreso de los Diputados y presidente del grupo municipal en la Paeria, Toni Postius, ha anunciado hoy la presentación de una Proposición No de Ley (PNL) para reclamar al gobierno español que se incluya la estación Lleida-Pirineos entre las paradas del nuevo servicio de AVE low-cost anunciado hace unos días y que se prevé que entre en funcionamiento a finales de 2020. Al mismo tiempo, también ha señalado la necesidad de aplicar el mismo descuento del 40% del precio de los billetes previsto para este nuevo servicio a los trenes que cubren el trayecto entre Lleida y Barcelona para evitar el agravio comparativo que significaría que fuera más barato viajar de Barcelona a Madrid que unir las dos capitales catalanas.
Según el anuncio del gobierno socialista, el AVE low-cost entre Barcelona y Madrid debería comenzar a operar a finales de 2020 con precios hasta un 40% más baratos que los actuales. El billete podría rondar los 52 euros y, en algunas franjas horarias podría llegar hasta solo 30 euros por trayecto. Postius ha querido destacar que "ahora mismo el precio del AVE entre Lleida y Barcelona, que solo hace una cuarta parte de los kilómetros entre Barcelona y Madrid, ya cuesta entre 30 y 43 euros", poniendo el acento en el hecho de que "se podría dar el caso de que fuera más barato viajar entre Barcelona y Madrid que ir de Lleida a Barcelona".
En este sentido, ha reclamado que se estudie la posibilidad de aplicar el mismo descuento del 40% previsto para este AVE low-cost a los trenes de alta velocidad entre Lleida y Barcelona "sobre todo teniendo en cuenta los cientos de personas que utilizan cada día este tren y que podrían recibir un agravio comparativo".
Postius ha anunciado, además, la presentación de una PNL en las Cortes españolas "donde pediremos que este nuevo servicio incluya una parada en la ciudad de Lleida" y que no pase como con el proyecto del tren EVA del gobierno del Partido Popular "que también olvidaba la ciudad". El tren AVE low-cost anunciado por el PSOE arrincona el proyecto anterior anunciado ahora hace un año por el ejecutivo de Mariano Rajoy que, bajo el nombre de EVA ya preveía una alta velocidad entre un 20 y un 25% más barata que con las tarifas actuales y que, si se hubieran cumplido los plazos previstos, debería haber entrado en servicio este mes de febrero.