Los Mossos d'Esquadra denunciaron penalmente el pasado domingo, 28 de mayo, a un vecino de Horta de Sant Joan (Terra Alta) por conducir por las calles de la población casi sextuplicando la tasa de alcoholemia permitida. Los hechos tuvieron lugar sobre las once y media de la noche, cuando vecinos alertaron de un vehículo que circulaba temerariamente por el casco urbano. Al llegar al pueblo, los agentes localizaron el vehículo en medio de la calle con su conductor, de 30 años y nacionalidad rumana, incapaz de efectuar ninguna maniobra dado su importante estado etílico. Las posteriores pruebas de detección dieron un resultado de 1,46 miligramos por litro de aire expirado, casi seis veces la tasa máxima permitida -0,25-. Al día siguiente, lunes, sobre las nueve y media de la mañana, el mismo conductor –que no acreditó disponer del permiso de conducir- rompió la trampa que inmovilizaba el vehículo para conducir hasta su domicilio.
El hombre, que el domingo por la noche había sido denunciado penalmente por conducir penalmente bajo los efectos de las bebidas alcohólicas, se enfrenta a una pena que iría entre tres y seis meses de prisión o entre seis y doce meses de multa o trabajos en beneficio de la comunidad no inferior a 31 días ni superior a 90. También se le puede aplicar la privación para conducir vehículos de motor entre uno y cuatro años. Adicionalmente, si se comprueba que no había dispuesto nunca de ningún permiso de conducir se enfrentaría a una pena de prisión adicional de entre tres y seis meses con multa de 12 a 24 meses o trabajos en beneficio de la comunidad entre 31 y 90 días. La posterior denuncia por desobediencia a los agentes de la autoridad, por la rotura de la trampa, puede suponer una multa de entre 601 y 30.000 euros.