El Portavoz del Grupo Municipal de ERC, Pau Ricomà, ha definido la gratuidad del servicio de autobuses como "una idea electoralista con consecuencias colaterales". Menciona que no será gratis porque Tarragona no puede prescindir de 5 millones de euros cada año, importe que se recauda en billetes.
Por otro lado, la propuesta del alcalde de Tarragona, Josep Félix Ballesteros, de convertir el aparcamiento de Battestini en un depósito de autobuses es otra de las ideas que el cabeza de lista de ERC no comparte. Según él, un espacio donde los buses se reparan, limpian y se proveen causará molestias a los vecinos, ya sea por el ruido o las emisiones de CO2 que este depósito supondría. Ricomà ha afirmado que: "el alcalde está dibujando una zona gris y está castigando a los vecinos". Ha dejado claro que su partido se opondrá radicalmente a este proyecto que supone una barrera hacia el Parque de la Ciudad, que está desaprovechado.
Para el partido republicano es primordial dotar de una buena conexión las líneas de autobuses y dar rapidez a los trayectos de un punto a otro de la ciudad.
Sobre las declaraciones del Arzobispo de Tarragona con respecto a los abusos
El candidato a la alcaldía ha tachado de impresentables las últimas declaraciones del Arzobispo de Tarragona, Jaume Pujol. Cree que un Arzobispo debe estar al lado de la gente que sufre y no de la que agrede.