Olot pondrá más barreras durante las Fiestas del Tura y se inspeccionarán mochilas

31 de agosto de 2017 a las 15:12h

Olot pondrá más barreras en las calles y principales accesos del casco antiguo de Olot para evitar el paso de vehículos a esta céntrica zona durante las Fiestas del Tura que se celebrarán del 6 al 10 de septiembre. Concretamente, se pondrán más barreras y bloques de cemento New Jersey a la vez que buena parte de pilones que ya hay quedarán bloqueadas durante la mayor parte de los días. La medida ya se implantó durante la fiesta mayor del año pasado, que cada año reúne a miles de personas, pero este año se ha decidido incrementar para "proteger mejor" la zona.

Desde la Policía Municipal como los Mossos d'Esquadra se ha remarcado que el nivel de alerta terrorista es el mismo que hace un año pero que los atentados de Barcelona y Cambrils les han llevado a reforzar algunos puntos. Otra novedad es que la policía hará controles aleatorios de mochilas para requisar las botellas de alcohol que puedan llevar menores sin comportar ninguna sanción y detectar objetos, como cuchillos, o drogas. Desde el Ayuntamiento han subrayado que en los últimos años se ha reducido el incivismo y los incidentes durante estas fiestas y que confían en que este año aún vaya mejor.

Estas medidas se han acordado durante la mesa de coordinación de las Fiestas del Tura que cada año se reúne unas semanas antes para planificar los dispositivos con la participación de los cuerpos de emergencias, Policía Municipal y Mossos d'Esquadra. Este jueves se ha hecho el último encuentro de los diferentes representantes para cerrar los últimos flecos cuando faltan pocos días para que empiece la Fiesta Mayor.

En líneas generales se mantiene el modelo de años anteriores porque se ha demostrado que es efectivo. Tanto el concejal de Fiestas, Pep Berga, como los responsables de Mossos y Policía Municipal han coincidido en decir que el nivel de incivismo y los incidentes, como robos, peleas o atenciones médicas se han reducido. Ahora bien, también han admitido que los atentados de Barcelona y Cambrils les han llevado a reforzar algunos puntos para "proteger mejor" el casco antiguo con más barreras de seguridad y pilones. Según el jefe de Mossos de la Garrotxa, Blai Ortiz, "aquello que se creía que era muy poco probable, ahora se ha demostrado desgraciadamente que podía pasar" y por eso se ha acordado reforzar la seguridad en los principales accesos y calles de esta zona y muy especialmente en aquellos puntos donde existen las principales aglomeraciones.

Si bien no han dado cifras del número de efectivos, lo que sí han confirmado es que este año habrá dos dotaciones del Área Regional de Recursos Operativos (ARRO) de los Mossos, y se mantendrá la presencia de policía de paisano. También se harán más controles de alcoholemia en las principales entradas de la ciudad.

Controles de mochilas Otra de las novedades de este año es que la policía hará controles aleatorios de mochilas para evitar el consumo de alcohol de menores, un tema que preocupa especialmente desde hace años y que se está trabajando-. El jefe de la Policía Municipal de la ciudad, Ignasi López, ha detallado que o bien se requisarán las botellas o se vaciarán para evitar su consumo pero en ningún caso habrá sanciones. Esta medida también les permitirá detectar drogas o posibles objetos punzantes, como cuchillos.

El principal objetivo del dispositivo, según Ortiz, es que la gente pueda disfrutar de las fiestas con unas garantías de seguridad y al mismo tiempo que las fuerzas de seguridad puedan actuar "lo más rápido posible ante un posible incidente".

Este año también se ha decidido modificar el recorrido de la Turinada (un pasacalle por el centro muy concurrido) por motivos de seguridad. Se mantiene la plaza del Carme como punto de salida pero continuará por la ronda Sant Bernat, la calle Esgleiers, plaza de Esteve Ferrer y Plaza del Mig. De este modo, el recorrido queda más acotado en una misma zona.