La Audiencia de Girona ha condenado a 5 años y 3 meses de prisión y multa de 1.800 euros al acusado de intentar matar a un hombre a tiros a plena luz del día en la terraza de un bar de Lloret de Mar el 9 de julio de 2020. La fiscalía pedía inicialmente 14 años y 9 meses de prisión. En el juicio, el procesado ha reconocido los hechos y las acusaciones y la defensa han cerrado un acuerdo para rebajarle la pena aplicándole atenuantes de reparación del daño y de drogadicción.
El acusado ha admitido que abrió fuego contra la víctima, que era el propietario del bar, sobre las 10.15 horas de la mañana. El proyectil le impactó en la zona inguinal. El hombre se refugió dentro del bar, pero el procesado le atrapó y disparó un segundo golpe, pero el arma "se encalló".
El juicio se ha celebrado este miércoles en la sección tercera de la Audiencia de Girona. El acusado ha reconocido los hechos y ha suscrito el escrito de acusación de la fiscalía, que recoge que la mañana del 9 de julio de 2020 estaba sentado en la terraza del bar con el propietario. Sobre las 10.15 horas, y después de decirle a la víctima que le mataría, le apuntó "por sorpresa" en la zona del pecho con un arma de fuego.
La víctima pudo reaccionar rápidamente y levantarse de la silla. Esto evitó, según la fiscalía, que el disparo "llegara al corazón". La bala impactó en la zona inguinal. La víctima corrió a refugiarse dentro del bar mientras el procesado le perseguía.
Un camarero intentó ayudar al dueño del bar a llegar al interior, pero el acusa le amenazó apuntándole con el arma en la cabeza. Así, consiguió entrar también dentro del lugar. Una vez allí, le volvió a apuntar con la pistola y apretó el gatillo. No consiguió disparar porque el arma se encalló.
El sospechoso huyó del lugar de los hechos, pero poco después la Policía Local le localizó y detuvo en una cafetería situada en la misma calle. Durante la inspección del local, los Mossos d'Esquadra encontraron una pistola escondida detrás de la cisterna del váter. Además, cuando registraron al detenido localizaron otra arma dentro de la mochila que llevaba.
El acusado no tenía permiso ni licencia de armas, pero, además, tenía prohibido tener o llevar armas durante 16 meses a raíz de una condena dictada en agosto de 2019 por un delito de lesiones en el ámbito de la violencia contra la mujer.
A consecuencia del ataque, la víctima sufrió una herida penetrante de 0,8 centímetros de diámetro en la zona inguinal izquierda y otra en el muslo por el orificio de salida de la bala. Estuvo un día ingresado en el hospital y tardó 39 días en curarse.
Reparación del daño y drogadicción
La fiscalía pedía inicialmente una pena de 14 años y 9 meses de prisión y multa de 6.480 euros para el acusado. En el juicio, que se ha celebrado este miércoles en la sección tercera de la Audiencia de Girona, el procesado ha reconocido los hechos y, además, ha consignado 7.800 euros para pagar la indemnización a la víctima.
Por eso, el fiscal, la acusación particular ejercida por el letrado Alex Moreno y el abogado de la defensa, Joan Pere Zapata, han cerrado un acuerdo que ha supuesto rebajarle la pena aplicándole atenuantes de reparación del daño y, también, de drogadicción porque en el momento de los hechos tenía las capacidades afectadas por el consumo de cocaína y marihuana.
Según la conformidad, la Audiencia le ha condenado a 3 años y 9 meses de prisión por un asesinato en grado de tentativa, 6 meses de prisión por un delito de amenazas, 1 año de prisión por tenencia ilícita de armas y multa de 1.800 euros por quebrantamiento de condena. En concepto de responsabilidad civil, deberá indemnizar al propietario del bar con 8.000 euros. También le han impuesto el pago de las costas procesales.
El presidente del tribunal, Ildefons Carol, ha declarado firme la sentencia.