Manel de la Vega quiere convertirse en la voz socialista de las Tierras del Ebro en Madrid. En su caso, se presentará como candidato al Senado, cámara de la que ya formó parte como senador de designación autonómica. El representante del PSC reivindica el trabajo del gobierno español en el Delta del Ebro y en infraestructuras clave para el territorio. Además, señala las políticas laborales que han aumentado los contratos indefinidos en las comarcas ebrenques. Entrevistamos a Manel de la Vega para desgranar sus propuestas de cara a las generales del 23J.
¿Qué está en juego en estas elecciones?Está en juego la esencia de la democracia. Estamos viendo unos tics que no se veían desde hace décadas, sobre todo en temas delicados como la igualdad de género o el respeto a la diversidad. Después también está en juego la política útil. La política ha de servir para unir a la gente, para fomentar el diálogo y respetar al otro. En cambio, desde fuerzas políticas -tanto en Cataluña como en el resto de España- estamos viendo que utilizan la dialéctica de la confrontación. No hablo de confrontación de ideas, sino de un modelo de vida y sociedad. Es peligroso.
Se habla del pacto PP-VOX, pero todo puede depender de los socialistas. Sea porque revaliden la mayoría o porque acuerden con el PP. ¿Por qué no se plantea esta opción, como pasa en otros lugares de Europa?Porque en España somos modelos antagónicos. Nosotros hablamos de tener un sistema de pensiones justo que suba con el IPC, mientras que el PP siempre ha defendido que no sea así. Nosotros defendemos que el salario mínimo interprofesional aumente en el tiempo y el PP siempre ha defendido que eso destruye puestos de trabajo. Hemos visto que no es verdad. En ámbitos como la Reforma Laboral, han dicho que no la derogarán, pero sí que harán cambios profundos que volverán a un mercado laboral muy flexible, donde la gente no tiene la certeza de un trabajo fijo. Según el último estudio publicado por la URV, 25.000 personas de las Tierras del Ebro tuvieron un contrato indefinido el año pasado gracias a la Reforma Laboral. Lo catalogaron como un hecho “espectacular”. Dar certezas a los trabajadores y un sueldo digno tiene una doble virtud: mejoras el sueldo y también la futura pensión que tendrá.
Usted ha sido ya senador por designación autonómica. ¿Qué se puede hacer desde el Senado por las Tierras del Ebro?El Senado tiene una representación territorial e intento defender las Tierras del Ebro. Lo que he hecho es preocuparme por temas tan importantes como el Delta del Ebro o el corredor del Mediterráneo. Cuando estás en el Senado tienes la oportunidad de poder hablar con los ministros y con los secretarios de estado, y hacer de esta manera una labor que no se podría realizar sentado en una oficina en Tortosa.
¿Qué receta tiene el Ministerio y el PSC para proteger el Delta?Hemos elaborado un Plan de protección del Delta del Ebro que actualmente se encuentra en una evaluación ambiental estratégica y que, una vez la pase, lo acabaremos de consensuar con la Generalitat y los agentes territoriales. Esto es innovador porque hasta ahora no existía ningún Plan de protección. En segundo lugar, por primera vez también se están haciendo obras preventivas en el Delta. Durante estos años se han invertido unos 10 millones en la protección del litoral y este último año unos 4 millones de euros en una obra preventiva. Se basa en coger arena de lugares sedimentarios y la llevamos a partes del litoral que se deben proteger, como la barra del Trabucador. Reforzamos toda la costa porque, cuando haya un temporal, pueda aguantar mejor. Aunque la Generalitat ha reconocido que tiene competencias en algunas cuestiones, de momento somos la única administración que se ha gastado dinero en el Delta.
La hasta ahora consejera de Medio Ambiente, Teresa Jordà, habla de pasividad del gobierno español en el Delta.Es una crítica que entra más en el ámbito político que en la realidad. Hemos invertido, lo hemos hecho por primera vez de manera preventiva y hemos elaborado un Plan de protección. Esta es la realidad. Por cierto, pasa una tramitación de evaluación ambiental estratégica porque lo pidió la Generalitat. Primero no teníamos intención de hacerlo porque, cada vez que tengas que ejecutar una inversión u obra del Plan, tendrá que pasar de manera preceptiva una evaluación ambiental ordinaria. El Plan estará más afinado, pero era innecesario y ahora los plazos se están alargando.
¿Cómo se encara el cierre de las nucleares?Hay calendario de cierre nuclear con las mismas empresas que las gestionan. No es un tema que nos tengamos que tomar a la ligera. Dependerá de que se puedan hacer las energías renovables necesarias. Tenemos un plan para implantar energías renovables en toda España y cumplir con la agenda 2030. El problema es que la Generalitat no ha hecho los deberes en energías renovables estos diez años. Si cuando llegue el plazo del cierre cumplimos con la agenda, es lógico que se cierren esas nucleares. A pesar de eso, nosotros también tenemos un Plan B. Pensamos que, cuando se cierren las nucleares, se deben aprovechar las líneas de evacuación para hacer un mix de energías renovables en el mismo lugar de las nucleares. De otra parte, también debemos trabajar el hidrógeno verde. Las Tierras del Ebro tienen una oportunidad porque somos uno de los pocos lugares del país con muchas energías renovables y lo debemos aprovechar para generar este hidrógeno verde.
En Europa hubo el debate sobre tener las nucleares como energías verdes de transición. ¿Se ha planteado dilatar su cierre para aprovecharlo?Si tenemos un plan para implementar las energías renovables, nos debemos atender al plan. Si no podemos alcanzar los objetivos, ya estudiaremos en su momento escenarios alternativos. Sería una tontería que comenzara a plantear estos escenarios porque queremos impulsar las energías renovables.
En este impulso de energías renovables, ¿nos podríamos encontrar que de nuevo determinados territorios cargáramos con todo el peso?Planteamos que todo el país ha de hacer su contribución. Donde no hace viento, quizás hace sol. Además, hay otras energías como la geotérmica o la hidráulica. Por ejemplo, hay un proyecto que es la central reversible de Riba-roja de Ebro que haría de efecto pila. En el caso de Barcelona, deben impulsar las energías solares en comunidades de vecinos. Hay mil fórmulas para que todo el país pueda implicarse. De hecho, los municipios más pequeños tienen mayores subvenciones. En esta línea, también hemos reducido de manera espectacular la brecha digital y en 2025 todos los municipios tendrán conexión a internet de alta velocidad.
La gratuidad de las autopistas ha sido tema de debate en las elecciones. ¿Se debería volver a cobrar?Las autopistas ya se están pagando. Desde el ministerio se vuelven a licitar los contratos de mantenimiento de las autopistas. En el caso de la demarcación, la AP7 y la AP2. La autopista a veces es una necesidad. Tener una movilidad más rápida también es bueno para el país porque la mayoría de mercancías pasan por carretera. Debemos potenciar el ferrocarril, pero esta es la realidad. Si pones un peaje, lo único que haces es recargar los productos que pagará la gente. No nos planteamos poner autopistas de pago porque ya lo paga la administración y es un servicio público que damos. Lo que sí que estamos haciendo es la primera fase de ampliación del tercer carril de la AP7.
¿Cuáles son las otras demandas en infraestructuras?Cuando hablamos de demandas, hablamos de lo que ya estamos haciendo. Por cada kilómetro del corredor del Mediterráneo que hacía el PP, nosotros estamos haciendo 5. Este último año se han puesto a disposición más de 200 millones de euros en inversiones en el Corredor. Ya está en marcha poner el ancho internacional, con que las empresas del territorio podrán enviar los productos a Europa con costos más baratos y rebajando la huella de carbono. Por eso, llevamos la propuesta de hacer un Hub Logístico en la Aldea. De esta manera, las empresas del polígono Cataluña Sur -que lo queremos ampliar- y los camiones que vengan del sur podrán descargar la mercancía allí.
De otra parte, se ha hecho un convenio con la Generalitat para traspasar 250 millones de euros para hacer 16 salidas de autopista en la AP7 y la AP2. Una será a la altura de Masdenverge. Además, se ha adjudicado el proyecto constructivo de la circunvalación de Gandesa (N420) y estamos estudiando poder hacer la circunvalación de Corbera de Ebro y una salida más a la altura de Móra de Ebro. Sin embargo, hay un tema enquistado de la década de los 2000 que sería reemprender el proyecto de la A7. Es una vía que debería conectar la Jana (País Valenciano) con el Hospitalet de l’Infant por el interior de Tierras del Ebro. Daría salida a la industria del mueble de la Sénia y daría mejor conectividad al territorio. Es un proyecto de futuro y debemos acordar el trazado con el resto de fuerzas políticas.