Los Mossos d'Esquadra han desplegado un amplio dispositivo esta madrugada de sábado en la discoteca Waka con un balance de 906 personas identificadas, 10 denunciadas por posesión de drogas y otra denunciada por falta de respeto a los agentes de la autoridad. La macrobatida se ha producido alrededor de las dos y media de la madrugada y ha reunido a cerca de un centenar de agentes de los Mossos, entre ellos miembros de los antidisturbios, de seguridad ciudadana y de la policía administrativa. La discoteca Waka, dentro del término municipal de Sant Quirze del Vallès, ha sido protagonista de varios incidentes en los últimos años con graves disturbios en las puertas del recinto, peleas en el interior, incidentes racistas y agresiones sexuales.
La última polémica fue la difusión de un vídeo de una menor practicando una felación a un joven en plena pista de baile. La madre de la chica presentó una denuncia por agresión sexual alegando que su hija no recordaba nada y que podía haber sido drogada. A principios de noviembre, un dispositivo policial en el exterior de la discoteca Waka terminó con lanzamiento de piedras, dos agentes heridos leves y dos jóvenes detenidos acusados de atentado a la autoridad. Pocos días antes, una menor denunció una agresión por un miembro de seguridad de la discoteca durante la noche de la Castañada. El propio ayuntamiento de Sant Quirze del Vallès ha asegurado sentirse "indefenso" por "la actividad insegura y problemática" en la discoteca Waka, y ha reclamado a la Generalitat que actúe.Un centenar de agentes de los Mossos, con presencia del comisario Eduard SallentLa macrobatida policial de esta madrugada en la discoteca Waka ha sido supervisada 'in situ' por el comisario jefe de los Mossos, Eduard Sallent, y ha conllevado el despliegue de una docena de furgonetas de los Mossos y cerca de un centenar de agentes. Alrededor de las dos y media de la madrugada, los policías han entrado en la discoteca, se ha parado la música y se han abierto las luces. La megafonía ha explicado a los asistentes que se estaba llevando a cabo un dispositivo policial de seguridad en el entorno del ocio nocturno. Todas las personas que había en el interior -906- han sido cacheadas e identificadas a través de los DNI y, posteriormente, han podido abandonar la sala de fiestas. También se han identificado los vigilantes de seguridad, controladores de accesos y el resto del personal de la discoteca.
