Los Mossos recuperan 393 conjuntos arqueológicos de yacimientos expoliados

10 de enero de 2018 a las 09:34h
Los Mossos d'Esquadra han podido determinar el alcance de la actividad expoliadora de yacimientos arqueológicos de toda Cataluña que habían llevado a cabo dos hombres que fueron detenidos el pasado agosto. La investigación se había puesto en marcha en 2016 cuando los agentes detectaron la venta de material arqueológico falso y de objetos paleontológicos expoliados en yacimientos. En el registro que la policía practicó en los domicilios de los arrestados, conjuntamente con dos técnicos del Departamento de Cultura que hacían funciones de asesores, solo pudieron intervenir una pequeña parte del material expoliado ya que la cantidad de piezas era ingente. Por este motivo, una vez valorada la colección y su procedencia, se solicitó al mismo juzgado una nueva entrada y registro para recogerla en su totalidad y la intervención se produjo durante el 29 y 30 de noviembre y el 1 de diciembre, en los que se comisaron 393 conjuntos arqueológicos con más de 20.000 piezas indicativas.
En el traslado de las piezas participaron seis agentes de los Mossos d'Esquadra, dos arqueólogos y un paleontólogo del Departamento de Cultura, además de dos técnicos de una empresa especializada en la manipulación de este tipo de material y dos secretarios judiciales. Se recogieron miles de objetos, mayoritariamente vinculados a la paleontología y procedentes de yacimientos catalanes. La cantidad de material era tan importante que se necesitaron cuatro furgonetas y tres días de trabajo para poder trasladarlo a un centro dependiente del Departamento de Cultura. Los especialistas que participaron constataron que nunca habían visto una cantidad de objetos expoliados de esta magnitud. Aunque ya se puede hacer una primera valoración del alcance del expolio, los técnicos deberán llevar a cabo un trabajo que se alargará unos meses para el estudio y valoración de las piezas, además de poder comprobar y evaluar sobre el terreno los daños causados a los yacimientos. En este punto de la investigación se pueden ubicar gran parte de los lugares saqueados, algunos de los cuales serían yacimientos aún no catalogados ya que no se conocía su existencia. En el registro se encontraron en diversas estancias del domicilio numerosas estanterías metálicas, cajas de plástico, clasificadores y álbumes donde guardaban y almacenaban miles de piezas, mayoritariamente paleontológicas. Utilizaban metodología archivística donde habían hecho constar en fichas manuscritas y en bases de datos el emplazamiento original del objeto y la fecha exacta del descubrimiento y recogida. En agosto, los investigadores también intervinieron cientos de archivos que los arrestados guardaban en diversos soportes informáticos. Se trata de fotografías de los investigados en plena tarea expoliadora, además de documentación y cartografía de los yacimientos saqueados y anotaciones para llegar a los lugares a pie. Los expoliadores habían dejado marcados los puntos saqueados o pendientes de excavar en diversas capturas de pantallas de mapas extraídos de aplicaciones de geolocalización. En el transcurso de la investigación, los policías han obtenido evidencias de su actividad en 168 yacimientos arqueológicos y en 32 de paleontológicos, algunos de los cuales aún sin catalogar, hecho que en ningún caso los situaría fuera del marco de protección que la ley les confiere. El material expoliado tiene un alto valor científico y los objetos recuperados el mes de agosto fueron valorados en más de 30.000 euros. En cuanto al resto de la colección, los investigados la valoran en más de 80.000 euros. De hecho, solo los ingresos de los siete primeros meses a partir de una sola web les habrían reportado una media de más de 1.000 euros mensuales. Al menos se conocen cuatro sitios web en Internet donde habrían vendido o subastado las piezas expoliadas. La investigación ha determinado que los dos detenidos habrían expoliado en los últimos años varios yacimientos arqueológicos y paleontológicos declarados Bienes Culturales de Interés Nacional en toda Cataluña de forma sistemática e intensiva. En este sentido, cabe destacar que su formación académica les habría permitido participar en excavaciones arqueológicas legales y oficiales en los yacimientos afectados. Este hecho lo habrían aprovechado para determinar su actividad expoliadora y conocer el material susceptible de ser sustraído en cada emplazamiento. Los bienes expoliados proceden de yacimientos que se concentran en el Pirineo Occidental, Osona, la Garrotxa, el Ripollès, el Empordà y diversas áreas de la demarcación de Barcelona y Tarragona. Las comarcas más afectadas por la actividad expoliadora son el Pallars Jussà, el Alt Urgell por su afectación paleontológica con más de una docena de emplazamientos afectados. Hay otros casos en los que a la afectación paleontológica se le suma la arqueológica, como el caso de la comarca de la Selva con 33 yacimientos, la Garrotxa con 19, Osona con 18 y el Gironès con 10. Los Mossos destacan que esta operación policial ha permitido recuperar un material que es de dominio público y subrayan que lo que contienen los yacimientos pertenece a la ciudadanía y representa un valor cultural incalculable, más allá de lo estrictamente económico. Los Mossos también resaltan que la actividad furtiva no solo sustrae estos objetos que son fundamentales para poner contexto a la historia, sino que los daños a los yacimientos son definitivos cuando se malmeten los estratos geológicos que permiten explicar una parte importante de lo que ocurrió y cómo vivían los antepasados, es decir, los robos de las piezas comportan una descontextualización histórica que agrava el problema. La disposición de cada pieza dentro del yacimiento, según el nivel donde se sitúa y el conjunto de objetos permite a los arqueólogos entender y explicar los acontecimientos que se produjeron. Esta información se pierde definitivamente con los expolios y los autores solo obtienen una mínima cantidad de dinero, se exponen a penas de prisión y perjudican a la comunidad científica y a la sociedad en general.
Sobre el autor
C CIUTAT
Redacció
Ver biografía
Lo más leído