La crisis económica que comenzó en 2008 más la reforma del sistema de las pensiones que entró en vigor en 2014 ha tenido un impacto negativo en la evolución de las pensiones entre 2010 y 2017 que ha supuesto que cada pensionista catalán haya cobrado de media este año 673,87 euros menos en su nómina de jubilación anual, según el estudio 'Pensionistas. Mínimo 12 años para recuperar el poder adquisitivo perdido' elaborado por la UGT. La cifra sale de calcular la evolución del IPC entre 2010 y 2017 en Cataluña, que ha supuesto un incremento del 9,7% en el período estudiado, mientras que la revalorización decretada por el gobierno español ha sido solo del 4,7% para una pensión media de más de mil euros.
