Los grupos de la oposición en el Ayuntamiento de Lleida han condenado, en una rueda de prensa conjunta ante el consistorio, el encarcelamiento de los 7 consejeros e instan a Àngel Ros a que se posicione "a favor de la ciudadanía". En este sentido, el concejal del PDeCAT, Paco Cerdà, remarca la importancia de "posicionarse en contra de una medida absolutamente injustificada y que vulnera todos los derechos humanos como es el encarcelamiento de medio gobierno electo". Desde el punto de vista judicial, Cerdà considera que se han vulnerado todos los principios de defensa individual al transcurrir sólo 24h entre la citación y el encarcelamiento. A raíz de este hecho, dice, "da la sensación de que el auto estuviera hecho antes de escucharlos, un hecho absolutamente injustificable y que supone una vejación hacia la persona al encarcelarla sin ningún juicio ni defensa". Una vejación que, según el portavoz, se extiende a todo el pueblo catalán al tratarse de cargos electos.
Por otra parte, el representante del grupo de ERC-Avancem, Carles Vega, denuncia también la "inculpación y exposición a penas de ciudadanos y ciudadanas que en el ejercicio de su libertad de expresión han sido inculpados y sancionados por los cuerpos policiales del Estado". Vega critica que el sistema jurídico "se ha demostrado fallido, fruto de una transición inexistente". Desde el punto de vista local, ha cargado contra el discurso al alcalde Àngel Ros durante la conmemoración del bombardeo al Liceo Escolar, el cual "fue deplorable e indigno al decir que está muy triste, pero que los encarcelados se lo han buscado al cometer un delito". En última instancia, el portavoz afirma que se está viviendo una situación "de anomalía democrática, con una justicia politizada y un equipo de gobierno en la Paeria que no se posiciona a favor de la democracia y de las libertades, tanto de los representados legítimos como de la ciudadanía".
Por su parte, Sergi Talamonte, del Comú de Lleida, considera que "los representados políticos deben estar a la altura y rechazar los hechos que estamos viviendo". En este sentido, ha remarcado que ya no se trata de una cuestión de independencia, sino "del socavamiento de la propia democracia, de la libertad y de los derechos civiles". Según Talamonte, "da vergüenza, como concejal y como ciudadano de Lleida, vivir con un Ayuntamiento incapaz de posicionarse contra el encarcelamiento de presos políticos".
Desde el grupo de la Crida per Lleida-CUP, Pau Juvillà exige a Ros que apoye a personas "como Meritxell y Kenneth, detenidos por la Guardia Civil y llevados al calabozo durante una noche por supuesta incitación al odio en las redes sociales, y la compañera de la PAH también sancionada por ejercer su libertad de expresión". El portavoz insta al alcalde "a que los defienda, que no se esconda como hizo el 1 de octubre y que se ponga en contacto con las personas agredidas aquel día, muchas de las cuales ya están llevando denuncias a los juzgados".
En conjunto, los grupos de la oposición afirman que apelarán directamente al gobierno de la Paeria y que, en caso de no ser escuchados, "utilizarán los medios que tienen a su alcance, desde comisiones hasta el propio pleno para dar voz a la gente a la que se le niega la libertad". Explican que aún desconocen cómo se llevará a cabo esta apelación, aunque podría hacerse como propuestas de resolución a la comisión de seguridad o presentarse al pleno en forma de moción.
Por otro lado, éstos aún no han confirmado la adhesión a la huelga general convocada para la semana que viene por parte de la Sindical al no haber tenido tiempo de reunirse. Aún así, según explica Carles Vega, "se deben tomar medidas contundentes y pienso que ésta sería una muy eficiente". La oposición afirma que seguirán participando en los actos oficiales y que iniciarán la apelación planteando comisiones o en el pleno del Ayuntamiento.