El Grupo de Estudio y Protección de los Ecosistemas Catalanes y Ecologistas de Cataluña (GEPEC-EdC) presentará una denuncia en instancias judiciales contra el Gobierno si no saca a los toros de la Isla de los Toros de Vinallop, en Tortosa. También pedirá "que se depuren posibles responsabilidades", por supuesta prevaricación, por incumplir la normativa de un espacio Reserva de Fauna Salvaje y parte de la Red protegida europea Natura 2000. Los ecologistas defienden que la actividad ganadera y silvícola está prohibida en la Isla de Vinallop y que la gestión de los toros bravos a través de un ganadero pone en riesgo "los valores botánicos" de la isla, donde existen "comunidades fluviales de conservación prioritaria" y especies "muy raras y protegidas por la ley", como es la madreselva de río (Lonicera biflora). Desde el GEPEC-EdC rechazan la decisión de la Generalitat, que califican "de inaudita", de mantener los toros salvajes en la isla del Ebro en Vinallop, en Tortosa. El Gobierno ha contratado a un ganadero y un veterinario que se encargan de gestionar los toros, sanearlos y esterilizarlos para evitar que esta población bovina de la Isla siga aumentando. Ahora hay una veintena de animales. Los contratos adjudicados, por valor de unos 30.000 euros, también prevén construir un cercado de madera y habilitar un embarcadero, a ambos lados del río Ebro, para facilitar el acceso a la isla.
Los ecologistas han decidido "tomar cartas en el asunto" porque la Isla de Vinallop es un espacio natural protegido, incluido en el Plan de Espacios de Interés Natural (PEIN), en la red europea de espacios protegidos Red Natura 2000, y forma parte de la Reserva Natural de Fauna Salvaje de las Islas del Ebro, aprobada en 1995 – que incluye las islas de Audí, Miravet, Móra la Nova, Vinallop y Xiquina-.
El GEPEC-EdC recuerda que la orden de creación de la reserva natural, en su artículo 3.1, prohíbe "permanentemente cualquier tipo de actividad silvícola, ganadera, cinegética y piscícola, y también la introducción de especies animales que no sean autóctonas". También consideran que "la actividad ganadera en espacios pequeños, como son las islas del Ebro, es totalmente incompatible con la preservación de las comunidades vegetales y las especies de flora amenazadas, que son eliminadas de forma radical por los animales en muy poco tiempo". "Justamente esta es la actividad que ahora la Generalitat está dispuesta a permitir y a potenciar", denuncian en un comunicado. "Una situación que es de una gravedad e irresponsabilidad máxima", añaden.
Con la consideración de que se trata de una actividad "del todo ilegal", y "el claro caso de prevaricación con graves consecuencias penales para sus responsables" que puede suponer, los ecologistas han pedido al director territorial del Departamento de Territorio y Sostenibilidad en las Tierras del Ebro, Antoni Suárez, y al director general de Políticas Ambientales y Medio Natural, Ferran Miralles, que cumplan la legislación vigente que prohíbe la actividad ganadera en la Isla de los Toros, y que retiren "inmediatamente" a los animales de este espacio. También reclaman que "posteriormente se tomen las medidas oportunas para minimizar los graves impactos que los toros han causado al patrimonio natural de la isla y que se favorezca la recuperación de las comunidades vegetales".
Si la Generalitat no rectifica, avisan de que presentarán una denuncia ante instancias judiciales para obligar a retirar a los toros y pedir responsabilidades a quien corresponda por incumplimiento de la normativa de protección.