Este lunes a primera hora de la tarde se ha hecho la entrega de la placa que acredita este galardón. El diario gastronómico digital 'Va de Gust', especializado en productos de calidad arraigados a un territorio, propuso el pasado mes de mayo a sus lectores que sugirieran dónde se pueden comer los mejores calamares a la romana de toda Catalunya. Después de recibir más de 400 recomendaciones de bares o restaurantes repartidos por toda la geografía catalana, finalmente la publicación digital propuso a sus lectores y lectoras un segundo reto. De entre todos los establecimientos más nombrados, se redujo la propuesta a 10 locales para que las votaciones dirimieran el reto de elegir en cuál de ellos se hacen los calamares a la romana más buenos de Catalunya. 'Cafè Terrassans', los mejores calamares a la romana de comarcas gerundenses Nuevamente la respuesta participativa al reto ha sido masiva, de modo que se han recibido más de un millar de votos para elegir los mejores calamares a la romana. De este total de participantes, el establecimiento gerundense que ha obtenido la mejor puntuación ha sido el 'Cafè Terrassans', con un 37% de los votos totales, más de un millar. Esto le ha significado ganar el Segundo Premio. Por votación popular, pues, los calamares a la romana del 'Cafè Terrassans' son los mejores de comarcas gerundenses, ya que el Primer Premio ha sido para el Restaurante Mediterrani Blau, de la localidad tarraconense de Amposta. Para entregar el preciado galardón, este mediodía se ha desplazado hasta Blanes el subdirector de 'Vadegust', Ramon Roset, Gastrónomo y Sumiller. Lo ha entregado a dos generaciones del 'Cafè Terrassans': Fèlix Bota y su hija Sara Bota. Aparte de hacer entrega de la placa que certifica el galardón gastronómico, el representante de la revista también ha querido hacer la prueba empírica que ha certificado que, realmente, los calamares a la romana del 'Cafè Terrassans' son los mejores. Esto es porque después de probar una bandeja ha comprobado que reúnen los tres requisitos que se pedía: los calamares deben ser frescos, deben estar bien rebozados y no tener un exceso de harina; y bien fritos para que sean crujientes. Más de 50 años disfrutando de los calamares a la romana de los Terrassans De hecho, la tapa de los calamares a la romana del Cafè Terrassans se puede decir que toda la vida ha sido reconocida como la más popular del céntrico establecimiento situado junto al Ayuntamiento de Blanes, ya que es la más solicitada. Actualmente están al frente de los Terrassans Fèlix Bota y su hija, Sara Bota, después de que la saga familiar la iniciaran los padres de él, Joan Bota y Pepeta Gibert. Fue en 1962 cuando se hicieron cargo del negocio, popularizando durante los primeros años el vermut a base de berberechos y almejas. Entre 1969 y 1970, comenzaron a entrar las tapas calientes, y entre ellas la más apreciada ya lo eran los calamares a la romana. Fue la madre de Fèlix Bota, Pepeta Gibert, quien ideó la receta original, que ha perdurado hasta hoy en día. Desde que la actual tercera generación, Sara Bota, regenta el establecimiento junto a su padre, la joven empresaria ha introducido los cambios necesarios para mejorar aún más el producto, sobre todo en lo que se refiere a su elaboración en la cocina. Sin desmerecer los calamares a la romana que se hacen en otros establecimientos de restauración de Blanes –una de las tapas más apreciadas porque se trata de una villa de raíces marineras–, los que se hacen en los Terrassans son reconocidos internacionalmente, y son el producto más solicitado. Según calcula Fèlix Bota, que lleva más de 30 años trabajando en los Terrassans –primero con sus padres, después en solitario y ahora con su hija–, cada año se producen 12 toneladas de calamares, que pronto se dice.
