Lleida cuenta, a partir de este mes de noviembre, con dos nuevas estaciones municipales para la recarga de vehículos eléctricos, ubicadas en la Avenida Pinyana: una frente al Hospital Arnau de Vilanova y otra cerca del cruce con Av Alcalde Porqueres. Se trata de puntos de recarga rápida, con una potencia de hasta 50 KW, que dan servicio a la mayoría de vehículos eléctricos del mercado. Las dos nuevas estaciones de recarga permiten que, con un tiempo de recarga aproximado de 30 minutos, se pueda llegar hasta el 80% de la carga.
La incorporación de las dos nuevas estaciones de recarga rápida en la ciudad refuerza la cobertura de servicio en la ciudad de Lleida. Hasta ahora la ciudad contaba con dos puntos, uno ubicado en la calle Jaume II frente al Edificio Polivalente del Campus de Cappont de la UdL que entró en funcionamiento en 2016 y es de recarga rápida, y una segunda de recarga semirrápida ubicada en la calle Magí Morera instalada en 2018. La utilización de estas dos estaciones ha ido en aumento de forma continuada desde su puesta en funcionamiento, hasta llegar aproximadamente a tener de media 130 y 90 recargas mensuales respectivamente.
La recarga en estos puntos públicos es gratuita para promover la movilidad eléctrica. Para disfrutar de este servicio el usuario del vehículo eléctrico necesita una tarjeta de recarga, que puede solicitar en el Ayuntamiento de Lleida. Se trata de una tarjeta compatible con el resto de cargadores públicos catalanes, la mayoría de los cuales también disponen de gratuidad de recarga.
Otras medidas que el Ayuntamiento de Lleida tiene para promover la movilidad eléctrica son la bonificación del 75% del impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica y la gratuidad de estacionamiento en zona azul.
Los vehículos eléctricos forman parte de las alternativas al vehículo de combustión, responsable de la mayoría de problemas de contaminación y ruidos y de un 32% de las emisiones de CO2 de la ciudad, y sirve como complemento a soluciones como el transporte público, la bicicleta, el coche compartido, etc., para mejorar la calidad de vida en las ciudades.
En este sentido los vehículos son mucho más eficientes energéticamente que los de motor de combustión interna. Así, mientras el rendimiento de un vehículo eléctrico es superior al 75%, los de combustibles fósiles tienen una eficiencia del 30 o del 45% en el mejor de los casos. Otra gran ventaja de la sustitución de los vehículos de combustión por eléctricos es que permiten bajar los niveles de contaminación y ruidos perjudiciales para la salud.
Si el vehículo eléctrico se carga con "electricidad verde" (a través de la compra de energía a comercializadoras que con certificado de electricidad proveniente de fuentes renovables) permite reducir las emisiones de CO2 drásticamente comparado con las emisiones de los motores de gasolina o diésel, de forma que se contribuye a mitigar el cambio climático, conjuntamente con otros medios de desplazamiento como son ir a pie, en bicicleta y en transporte público.
La instalación de estos dos nuevos puntos de recarga rápida han sido subvencionados al 100% por el Instituto Catalán de la Energía en el marco del programa PIRVEC de la Generalitat de Catalunya por un valor de 80.000€.
