Linyola restaura el antiguo carro funerario del municipio

17 de julio de 2018 a las 11:12h
Linyola restaura el antiguo carro funerario. Se trata de un carruaje tirado por caballos y destinado al transporte de féretros desde la población de Linyola hasta su cementerio a las afueras del pueblo, durante los inicios del siglo XX. Este carruaje estaba guardado en un espacio semi-cubierto del cementerio de Linyola y se encuentra bastante deteriorado debido a la poca conservación y el paso de los años. Ahora el ayuntamiento prevé restaurarlo, intentando recuperar el aspecto original que tenía a principios de siglo. Àlex Mases, alcalde de Linyola explica que el primer carro funerario del municipio se adquirió en los alrededores del año 1875, cuando se trasladó el cementerio a las afueras del pueblo. "Este primer carro funcionó durante 40 años. Fue en 1915 cuando el consistorio adquirió un segundo carro, que es el que en estos momentos se está restaurando, y que dio servicio hasta el año 1976", explica Mases. Las obras de restauración consisten en la recuperación del aspecto original, en la medida de lo posible. Para ello se tendrá en cuenta la documentación gráfica de la que se pueda disponer, y el estudio de otros carruajes que siguen el mismo modelo. "Se trata de una intervención de conservación preventiva y curativa, pero también de restauración estructural. El estado de conservación de la carroza es malo ya que ha sufrido importantes alteraciones, algunas de ellas afectan a la estructura y las ruedas del carro. El municipio usó este objeto durante muchos años y, como consecuencia, ha tenido modificaciones y sustituciones de piezas para reparar los desperfectos sufridos a lo largo del tiempo. La pintura también ha sido modificada varias veces. Por lo tanto, en la medida de lo posible, intentaremos recuperar el aspecto que tenía el carro a principios de siglo", añade el alcalde. La encargada de llevar a cabo esta obra es Idoia Tantull, experta en restauración de Bienes Muebles, y recomendada por el Centro de Restauración de la Generalitat. Se prevé que el carro esté terminado a finales de mes. Una vez finalice la restauración, el carro quedará expuesto en el cementerio de Linyola en un espacio donde se colocará una vidriera de forma que se verá tanto desde dentro de este lugar, como desde fuera.