En el marco de la operación Sitdown, la Guardia Civil ha detenido a cinco personas acusadas del secuestro, en la Vila Joiosa (la Marina Baixa), de un hombre de 27 años, de origen argelino, a quien mantuvieron secuestrado durante 11 días y al que propinaban continuas palizas para forzar a la familia a pagar el rescate.
Los secuestradores, 5 personas de nacionalidad española, con antecedentes de robo con violencia, hurto y apropiación indebida además de otros cargos, y con edades comprendidas entre los 19 y 28 años, han sido llevados a la prisión después de ponerlos la Guardia Civil a disposición de los juzgados de Cartagena y la Vila Joiosa acusados de un delito de secuestro extorsivo.
TORTURAS REGISTRADAS
El 27 de mayo pasado, cuando la víctima se dirigía desde el trabajo al domicilio de una amiga, fue secuestrado a punta de pistola por tres encapuchados.
Su desaparición fue denunciada dos días después cuando los captores se pusieron en contacto con la familia del joven en Argelia, pidiendo un rescate de 350.000 euros.
Los investigadores iniciaron entonces la operación Sitdown, y descubrieron que el hombre había sido trasladado primero a Santa Pola y finalmente a Yecla (Murcia), donde pudo ser rescatado.
El joven, atado con bridas, sufrió varias palizas utilizando los puños, un martillo e, incluso, lo habían torturado con un Taser, registrándolo todo para presionar a la familia, amenazando con matarlo si no pagaban el rescate.
La policía detuvo a las dos personas que lo vigilaban, para después hacer dos detenciones más en Cartagena y otra más en la Vila.
En momento del rescate el joven se encontraba en muy malas condiciones, ya que apenas le habían dado comida y lo habían sometido a un castigo físico duro, como hemos explicado. A pesar de esto, cuando la Guardia Civil liberó al joven, se encontraba consciente y salió por su propio pie del lugar donde lo mantenían retenido.