La intensa granizada que cayó el viernes en Girona ha afectado especialmente a negocios privados y viviendas particulares del centro de la ciudad. Este es el primer balance que ha hecho el ayuntamiento tras dar por normalizada la situación. La alcaldesa de Girona, Marta Madrenas, ha explicado que en los próximos días se podrá hacer una valoración "más acotada", pero ha resaltado que a nivel municipal "no hay grandes afectaciones", salvo el parqué del Pabellón que deberá cambiarse. Madrenas ha destacado que se trata de una granizada "inaudita" y asegura que la ciudad "estaba preparada". "La primera tromba de agua tapó los sumideros y la segunda lo inundó todo. Pasarán 40 años o más para volver a ver algo así", ha remachado.