Esta mañana la playa Llarga de Roda de Berà ha acogido una demostración del cuerpo de voluntariado de Cruz Roja ERIE -Equipo de Respuesta en Emergencias de Búsqueda y Rastreo-, de búsqueda, rastreo y salvamento de personas desaparecidas.
El simulacro de rastreo se ha iniciado a las once de la mañana con las explicaciones por parte de Judith Bruch y Josep Garriga, ambos voluntarios de Cruz Roja, quienes han hecho una descripción de su trabajo, de cómo son adiestrados los animales y de las duras pruebas que deben pasar antes de entrar a formar parte de la unidad.
El objetivo de la unidad canina ERIE es encontrar personas desaparecidas en cualquier entorno y circunstancia, ya sea en situaciones puntuales o bien en grandes desastres naturales. El equipo está configurado para dar respuesta tanto a nivel nacional como internacional y lo conforman varios perros de razas diferentes, con el fin de aprovechar las habilidades específicas de cada una.
Judith Bruch ha explicado que los perros son entrenados durante un mínimo de dos años y, una vez alcanzan la preparación, se examinan de tres pruebas basadas en la resistencia, la dificultad con tiempo y en el medio acuático y el bosque poblado.
Seguidamente, con una hembra llamada Flama han realizado un simulacro mediante el cual Josep Garriga se ha escondido en la playa y Flama, siguiendo el rastro a través del olor de una pieza de ropa, lo ha encontrado. Este método de rastreo se denomina "Ercbuli", que se centra principalmente en seguir el rastro de la persona desaparecida partiendo de un objeto, ropa, zapato o cualquier elemento que haya estado en contacto con ella. El animal es inmediatamente premiado por conseguir una respuesta positiva.
El simulacro ha contado con la presencia del alcalde, Pere Virgili, y de los concejales José Ibort y Joan Enric Vidal.