La Policía Local junto con los Mossos ha procedido esta semana al desalojo y cierre definitivos de todos los accesos de la antigua nave de la empresa ELFE, situada a las afueras del municipio, en la carretera de Banyeres.
La actuación policial, que ha contado en todo momento con el apoyo directo del consistorio y la coordinación del cuerpo de Mossos d'Esquadra, ha permitido evacuar y clausurar este edificio abandonado que era utilizado por un grupo de presuntos delincuentes que ya han abandonado el municipio y que serían los responsables de varios incidentes y robos ocurridos en el pueblo a lo largo de los últimos meses.
Joan Sans, alcalde de l'Arboç, pone en valor "la tarea cuidadosa y profesional" llevada a cabo por los agentes de la Policía Local durante todo el proceso y destaca que "en l'Arboç no hay lugar para aquellos que pretenden atentar contra el bienestar y seguridad de la gente, dos prioridades fundamentales del Ayuntamiento".
El desalojo y cierre de los accesos de la antigua nave industrial de la empresa ELFE, propiedad de tres entidades bancarias, supone la culminación de un largo proceso legal que se ha ido gestando a lo largo de los últimos meses con la intervención directa de todos los agentes implicados y que, gracias al trabajo conjunto y a la diligencia de los cuerpos policiales y el Ayuntamiento, se ha podido solucionar de forma definitiva y garantizando los intereses del conjunto de la población arbocense.