La nevada que ha caído esta madrugada en la plana de Lleida ha hecho caer mallas protectoras antigranizo en fincas de fruta de l'Urgell y el Pla d'Urgell. La instalación ha quedado destrozada y también se han dañado los árboles de debajo, según ha informado la organización agraria Asaja. En concreto, serían dos casos, una plantación situada entre Bellpuig e Ivars d'Urgell y otra en Barbens. Asaja pide al Departamento de Agricultura ayudas extraordinarias para los afectados, ya que aseguran que los daños pueden cifrarse en unos 25.000 euros por hectárea. Por otra parte, los agricultores están alerta por si bajan más las temperaturas y las heladas pueden afectar a los árboles florecidos. En las zonas de secano, la lluvia y la nieve ha sido muy beneficiosa para los cultivos de trigo y cebada, según Unió de Pagesos.
El presidente de Asaja Lleida, Pere Roqué, asegura que las mallas protectoras "han quedado inservibles y, al caer, han dañado los árboles de debajo, con pérdidas de hasta el 100% en algunos casos, tanto de producción como de toda la instalación". El presidente de la asociación de empresarios agrarios exige subvenciones específicas para los productores para paliar los efectos de la nevada, ya que "no podrán producir hasta dentro de mucho tiempo, sumando gastos e inversiones extraordinarias sobrevenidas". Aparte de estas afectaciones graves pero puntuales, de momento no ha habido heladas generalizadas que hayan dañado los árboles frutales. Los agricultores, sin embargo, están muy alerta de la evolución de las temperaturas las próximas dos o tres noches, porque si bajaran de los cero grados sí que podrían afectar a los árboles florecidos, sobre todo perales y manzanos de las zonas nevadas. Así lo ha asegurado el coordinador territorial de Lleida de Unió de Pagesos, Jaume Pedrós. En todo caso, Pedrós también ha insistido en que la lluvia que ha caído en las zonas de secano ha sido muy beneficiosa para el cereal de invierno, ya que en este caso los agricultores "ya empezaban a estar preocupados por la falta de lluvias" y ahora "esta agua de primavera es muy apreciada y garantizará que la cosecha no se pierda".
