El 80% de los trabajadores de Pont Ainé han secundado la segunda jornada de huelga convocada por el comité de empresa para reclamar mejoras laborales y salariales. La estación, por tanto, se ha detenido prácticamente del todo entre las 11 y las 3 de la tarde. En Espot, en cambio, el seguimiento ha sido muy minoritario (del 3,5%) y no ha habido repercusiones en el funcionamiento del complejo, según admiten tanto la dirección como los representantes de los trabajadores. Son datos muy similares a los de este sábado, primer día de una serie de paros que están previstos para todos los fines de semana hasta finales de febrero. No obstante, trabajadores y dirección confían en reanudar las negociaciones para poder desconvocar la huelga lo antes posible. Entre las dos estaciones hay unos ochenta empleados.
El director de las estaciones pallaresas, Xavier Bigordà, ha explicado que este domingo han acudido a Port Ainé 250 esquiadores -que han pagado la mitad de forfait como compensación por el paro- mientras que Espot ha tenido 765 visitantes, una cifra menor de lo habitual tanto por los efectos de la huelga como por el mal tiempo, ya que ha hecho mucho viento y ha llovido. En todo caso, entre el sábado y el domingo han pasado por las estaciones del Pallars 3.170 esquiadores, la mitad de lo que se podría esperar en un fin de semana de enero como este, según el director. Bigordà insiste en que la afectación del paro ha sido evidente, tanto por los ingresos de las estaciones como para la actividad económica de la comarca, y por eso confía en que los representantes de los trabajadores se sienten a negociar para desconvocar el resto de jornadas de huelga. Para el portavoz del comité de empresa, Xavier Pedemonte, "la valoración es bastante satisfactoria por el alto seguimiento de la huelga en Port Ainé y porque no ha habido incidencias más allá de las molestias que ocasiona una huelga" y ha añadido que "la semana que viene esperamos tener una reunión con la empresa y que nos presenten alguna oferta; una vez muevan ficha valoraremos cuáles son nuestros mínimos". El comité ha evitado esta vez reunirse previamente con representantes políticos y del sector turístico de la comarca, como sí hicieron en los anteriores anuncios de huelga de 2016 y 2014 que terminaron desconvocando para "evitar presiones" Reivindicaciones de los trabajadores El comité de empresa pide la equiparación de salarios y categorías para personas que realizan las mismas funciones dentro de la empresa, ya sean personal fijo o los recién incorporados procedentes de empresas de trabajo temporal a quienes no se ha tenido en cuenta la antigüedad. También exigen las mismas condiciones laborales que tienen los empleados de las otras estaciones de esquí y servicios que gestiona el grupo de Ferrocarriles de la Generalitat (La Molina, Vallter, Vall de Núria, y el cremallera de Montserrat), como es la misma jornada laboral anual (con una reducción de 38 horas al año) y el cobro de los atrasos de los pluses complementarios al sueldo base durante las vacaciones desde 2014. Entre las demandas también destaca la gratificación para las personas que realizan trabajos más peligrosos o de responsabilidad, como son los maquinistas que deben utilizar cabrestante para asegurar la máquina, los conductores de telecadires desembragables y las personas que por diferentes motivos deben estar disponibles haciendo guardias (no reconocidas) durante sus horas de descanso. Desde el comité también se quejan de que la comisión de seguimiento de todas estas medidas lleva tres años "estancada".
