La familia del joven, de 20 años y vecino de Sant Salvador de Guardiola, fallecido este lunes a causa de una peritonitis derivada de una apendicitis, ha asegurado a ACN que presentará una querella contra el Hospital Sant Joan de Déu de Manresa porque consideran que ha habido negligencia médica. De hecho, según ha asegurado una portavoz de la familia, Eba Álvarez, el mismo centro ha reconocido haber cometido un error. Según ha relatado, el joven acudió a urgencias hasta cuatro veces –dos en el CAP de Sant Salvador de Guardiola y dos más en el Hospital Sant Joan de Déu de Manresa- y, en todos los casos, lo enviaron a casa y le diagnosticaron estreñimiento. Álvarez lamenta que todo esto se habría podido evitar si le hubieran hecho las pruebas adecuadas. La ceremonia de despedida del joven tendrá lugar el miércoles, a las once de la mañana, en la iglesia de Sant Salvador de Guardiola.
El joven fallecido por peritonitis acudió por primera vez al CAP de Sant Salvador de Guardiola el 3 de septiembre, pero en este caso el médico le diagnosticó gastroenteritis. Unos días más tarde, acudió al hospital Sant Joan de Déu de Manresa, donde le diagnosticaron estreñimiento. Volvió al hospital días más tarde, pero el diagnóstico siguió siendo el mismo y, por último, el pasado 19 de septiembre volvió a acudir al CAP de Sant Salvador de Guardiola donde le siguieron diciendo que sufría estreñimiento. Según ha relatado a ACN la portavoz de la familia, Eba Álvarez, al día siguiente, 20 de septiembre, "cuando se despertó, ya no se podía levantar, no veía bien y se desplomó". La familia llamó al 112 y el SEM envió dos ambulancias. El joven ingresó en el Hospital Sant Joan de Déu de Manresa en estado crítico y con una peritonitis avanzada. Sólo cinco días más tarde, murió. La familia lamenta que ningún médico hiciera las pruebas adecuadas y aseguran que con un TAC se habría podido detectar la apendicitis. Por este motivo, prevén denunciar al hospital por negligencia médica, ya que, de hecho, según ha asegurado Álvarez, el mismo hospital ha reconocido a la familia haber cometido un error en el diagnóstico. El caso recuerda al del joven igualadino Gabriel Pérez, de 24 años, que murió el verano del año pasado por peritonitis –derivado de una apendicitis- después de haber acudido hasta tres veces a Urgencias del Hospital de Igualada con fuertes dolores abdominales. En ese caso, el Departamento de Salud abrió un expediente al centro que terminó con una multa. La familia del joven puso una denuncia penal contra el hospital y está previsto que los médicos implicados vayan a declarar a los juzgados la semana que viene. La familia del joven bagenc fallecido lamenta cómo, teniendo en cuenta el caso de Igualada, no se ha ido con más cautela y atención.
