La cabeza de lista de la CUP por Lleida, Mireia Boya, ha acusado al gobierno español de estar recogiendo este lunes su "botín de guerra", en referencia a las 44 obras de arte del Museo de Lleida, y ha dicho que confía en que esto pase factura al PSC y a Àngel Ros en las elecciones del 21-D pero también en las próximas municipales. "El estado español ha venido a humillarnos, han venido aquí a buscar su botín de guerra", se ha quejado Boya, que ha negado que ésta ya sea una cuestión "sobre arte o sobre justicia". La líder de los anticapitalistas ha pedido al alcalde de la ciudad, Àngel Ros, que no vuelva a acercarse al museo a menos de 500 metros, porque "la gente está muy enfadada y tiene memoria". A su parecer, debería dimitir por su apoyo al 155. Ros se acercó al museo a medianoche y fue abucheado por los concentrados.
"Espero que esto le pase factura al PSC, no sólo dentro de diez días, sino en 2019, en las elecciones a la Paeria, para que deje esta silla a la que se ha agarrado con las uñas", ha espetado Boya a las puertas del museo, donde ha advertido que la ciudadanía no podrá olvidar la imagen de la Guardia Civil entrando en el equipamiento a las 4 de la madrugada para llevarse las obras. Boya ha alertado de que esto abre la puerta a otros litigios por otras obras en la Franja de Ponent y además "rompe la unidad histórica de los Países Catalanes". En todo caso, ha reivindicado la protesta "cívica, pacífica y tranquila" de los vecinos de Lleida, y ha añadido que esta actitud se mantendrá para impedir el traslado de más piezas.