La Comunidad de Regantes del Pantano de Riudecanyes considera complejo el uso de agua depurada en el sistema, pero se aviene a estudiar las soluciones que se propongan. Es la respuesta que da la entidad ante la propuesta que hizo el Gepec sobre la utilización del agua proveniente de las depuradoras del Baix Camp y, especialmente, de la depuradora de Reus para usos agrarios. Los regantes avisan de que es necesario estudiar a fondo cualquier actuación orientada a dar salida a este recurso procedente de la depuración de aguas residuales, teniendo presente todos los aspectos necesarios de calidad, de infraestructura, de alcance territorial, de coste y de regulación para evaluar la viabilidad de la propuesta. A partir de aquí, consideran que la incorporación al sistema Siurana-Riudecanyes de estos caudales de agua puede presentar una serie de inconvenientes que deberían resolverse antes de plantearlo como una solución a los déficits hídricos del Priorat y el Baix Camp. De entrada, se recuerda que cualquier solución debe ser adecuada para los usos actuales que tiene asignados la Comunidad de Regantes del Pantano de Riudecanyes y sus miembros y que conforman sus derechos. Esto es uso agrario y consumo de boca en algunos de los municipios que participan del sistema, como es el caso de Reus. En todo caso, según insiste la entidad, es necesario garantizar que el recurso obtenido tiene la calidad suficiente para todos estos usos, recordando que la normativa actual impide el uso de agua depurada para el consumo de boca.
Además, los regantes remarcan que la infraestructura actual del sistema Siurana-Riudecanyes es integral y no permite distribuir caudales en función de los diversos usos. "No vemos viable, hoy por hoy, la incorporación del agua depurada únicamente para el riego, además teniendo en cuenta las propias limitaciones legales en este aspecto", se destaca, desde la Comunidad de Regantes, a través de un comunicado.
Los regantes opinan que la incorporación de este caudal de agua proveniente de la depuración al sistema Siurana-Riudecanyes, teniendo en cuenta los usos, debería hacerse en las condiciones óptimas de tratamiento previo y en los puntos idóneos que permitieran una regeneración natural que mejorara la calidad del agua. También creen que debería ir acompañado de las infraestructuras necesarias y de su dotación presupuestaria, tanto en inversión como en explotación, para hacerlo posible.
A partir de aquí, la Comunidad de Regantes concluye que "la mejor solución equivaldría a reutilizar el agua tratada a partir de la presa del Pantano de Siurana, de manera que este recurso debidamente acondicionado pueda, además, regenerarse en el recorrido". De este modo, según la entidad, parte de este nuevo recurso liberado proveniente de las depuradoras del Baix Camp, junto con las de los pueblos del Priorat de la cuenca del Siurana, se integraría al caudal ecológico estable de la cuenca del río Siurana y al sistema Siurana-Riudecanyes.
Desde la Comunidad de Regantes se manifiesta que están abiertos a estudiar todas las propuestas que supongan una mejora en el uso de los recursos hídricos del territorio y optimizar su uso, pero, insisten en que cualquiera de las soluciones que se propongan deberá hacer valer los derechos adquiridos y vigentes de la corporación y sus miembros. Constituida en 2004 y adscrita a la ACA, la entidad agrupa a 3.000 familias del Baix Camp.