El Ayuntamiento de la Bisbal del Penedès ha instalado contadores a la salida de los pozos del Manyé, la Masieta y el nuevo de Can Gordei para, así, mejorar el control del agua que se extrae de cada uno de estos pozos y hacer más eficaz la distribución de agua en la red de suministro del municipio. También ha instalado contadores a la salida de los depósitos del Esplai, Can Gordei I, Can Gordei II, el Priorat de la Bisbal y la Miralba, así como el rebombeo de la calle Besòs de Can Gordei.
El pasado 31 de agosto la Junta de Gobierno aprobó la adjudicación de la contratación de Aqualia para la instalación de contadores para el control de los caudales suministrados en alta. Esta adjudicación se aprobó por un importe de 39.780,26 € (más IVA) de los cuales 12.650,94 € se pagarán con una subvención de la Agencia Catalana del Agua (ACA) y 27.139,32 € con el superávit del presupuesto del año 2017 (distribución de los importes aprobada en el pleno del 4 de junio de 2018).
La instalación de estos contadores permite un control exhaustivo de los caudales aportados a las diferentes redes del municipio y optimizar el rendimiento técnico del servicio, ya que tienen la capacidad de enviar vía internet los consumos, de forma instantánea, y analizar el consumo, así como detectar posibles fugas. De este modo, los operarios de Aqualia podrán actuar allí donde sea necesario de forma más precisa. Además, se han instalado alarmas en los depósitos que permitirán enviar avisos de niveles mínimos al teléfono de los operarios, con el fin de evitar posibles problemas de suministro. La alcaldesa de la Bisbal del Penedès, Agnès Ferré, ha explicado que "se trata de una inversión que era necesaria para mejorar la eficiencia de las instalaciones y para poder tener un control más riguroso y concreto sobre el suministro de agua al municipio".