El Ayuntamiento de L'Arboç está decidido a plantar cara al incivismo de algunos propietarios de animales. Con el objetivo de mejorar el civismo y la higiene de la vía pública, el alcalde Joan Sans y la concejala de Medio Ambiente Montserrat Pérez presentaron ayer, en un auditorio lleno, la nueva ordenanza que obliga a que los propietarios de perros aporten una muestra de ADN del animal al censo municipal. Por ello, en breve se pondrá en marcha una campaña para que todos los propietarios que no lo hayan hecho, pongan el chip al animal y aporten una muestra de sangre para censarlo gratuitamente. Actualmente, el Ayuntamiento tiene censados unos 400 animales.
De esta manera, se quiere crear un banco de datos canino local que se pueda contrastar con las muestras de excrementos que se recojan en calles y plazas para determinar a quién corresponden, poder localizar al propietario y actuar en consecuencia.
El técnico de la empresa encargada de analizar las muestras de sangre y heces, Òscar Ramírez, explicó los peligros que supone a nivel de virus y bacterias de las heces y la importancia de eliminarlos de la vía pública para evitar enfermedades. Explicó el proceso que se sigue para extraer el ADN de las heces y aseguró que es fiable en un 100%.
En el marco de este mismo proyecto, también se presentó la nueva Brigada Civil de Protección Animal que de momento cuenta con 25 personas interesadas en hacer de voluntarios y que velará por la tenencia responsable de los animales y hacer cumplir la normativa local. En una primera fase se encargarán de informar a todos los propietarios que en este caso también incluyen gatos y hurones y comprobar que los animales estén censados. Una vez finalizada, se encargarán de recoger las muestras que se encuentren y a través de una aplicación introducir el lugar donde ha sido localizada y hacerlas analizar.
El Ayuntamiento espera acabar definitivamente con este problema y a la vez, tener un censo real de animales en el municipio y saber de esta manera si las infraestructuras dedicadas a animales están bien dimensionadas a la población.
