El Seprona de la Guardia Civil ha localizado e inmovilizado en naves y almacenes agrícolas de las provincias de Lleida, Huesca y Madrid veneno para roedores, cuyo uso está prohibido en exteriores. En concreto, el cuerpo localizó 550 kilos, repartidos en sacos de semillas impregnadas con el veneno, en el marco de la operación 'Toxicum', dedicada a la detección y control de actividades ilícitas relacionadas con la colocación de venenos asociados a prácticas agrícolas. Según el Seprona, la semilla impregnada con el veneno no germina y se siembra aproximadamente a medio centímetro del suelo, para que se la coman diferentes especies de animales como topos, roedores o aves, pudiendo originar graves consecuencias al ecosistema, al pasar a la cadena trófica al morir alguna de estas especies a raíz de la ingesta del veneno. En la misma operación, también se localizaron pastillas de veneno depositadas en la entrada de madrigueras de conejos. A raíz de los hechos, el Seprona denunció a cuatro hombres, de edades comprendidas entre los 36 y los 69 años y vecinos de la comarca aragonesa del Cinca Medio y de Pamplona, como presuntos autores de un delito contra la fauna.
En el marco de la operación 'Toxicum', dedicada a localizar cebos o diferentes productos agrícolas envenenados, para controlar de forma ilegal posibles plagas de roedores u otras especies que frecuentan los cultivos, el Seprona localizó el 31 de enero en una finca agrícola de la comarca aragonesa del Cinca Medio a dos personas mientras sembraban de forma directa y sin ningún tipo de control semillas de trigo impregnadas de una sustancia rojiza, en una parcela del campo, para poder así establecer claramente después su ubicación exacta, según fuentes policiales
Los agentes pudieron determinar que la sustancia impregnada en las semillas se trataba de un veneno para roedores, que actúa como anticoagulante y que está totalmente prohibido para ser usado en exteriores. En la misma actuación, el Serpona también localizó en la entrada de madrigueras de conejos cebos de pastillas del mismo veneno situadas en terrenos cercanos.
Después de poder constatarse la existencia de un entramado comercial de las semillas, el Seprona procedió a identificar a los supuestos autores de los hechos que se dedicaban al comercio de forma ilícita del veneno. El cuerpo localizó y registró dos almacenes y una nave agrícola que se habrían estado utilizando para las actividades ilegales, en las provincias de Lleida, Madrid y Huesca. En total, se encontró e inmovilizó 550 kilos repartidos en sacos de semillas impregnadas en el veneno. El Seprona envió muestras de los productos y de las sustancias localizadas al Instituto Nacional de Toxicología y también al laboratorio de Sanidad Vegetal del gobierno de Aragón, ente que decretó el precinto de los sacos intervenidos.
Por estos hechos el cuerpo denunció a cuatro hombres. de entre 36 y 69 años, vecinos del Cinca Medio y Pamplona, como supuestos autores de un delito contra la fauna. El Seprona entregará las diligencias instruidas al Juzgado de Guardia de Fraga (Bajo Cinca).
