Fran Moreno, historiador y arqueólogo roquetenc, ha puesto sobre la mesa una investigación historiográfica presentada como separata de Fiesta Mayor de Santa Eulalia que supone un cambio de paradigma en los orígenes roquetencs; la primera casa de Les Roquetes se construyó en 1946 y su promotor, Michael L. Tingle (1885-1975), fue un británico nacido en Jamaica y vinculado al mundo de la ingeniería civil y la empresa Riegos y Fuerzas del Ebro, concretamente a la construcción de saltos de agua como Sant Antoni y Terradets en el Pallars Jussà y Flix en la Ribera d'Ebre.
Por lo que sabíamos hasta ahora, la historia de Les Roquetes era muy reciente; las primeras casas se habían empezado a construir en la segunda mitad de la década de 1950 por familias obreras que provenían de Andalucía y Murcia y que habían encontrado trabajo en la comarca, principalmente en Vilanova. Antes de esta época la zona que ocupa Les Roquetes había sido una zona de campos agrícolas vinculados a las masías históricas a caballo de Ribes y Vilanova como el Mas d'en Serra, la Masia Nova o Solicrup. La única excepción en este paisaje agrícola era la Bòbila Fita, un horno continuo de ladrillos junto a la riera de la Terrosa y que fue el primer edificio construido en el siglo XX.
La casa construida por Tingle y conocida como "Las Golondrinas" se encontraba junto a la Bòbila Fita y la riera de la Terrosa, en los terrenos donde actualmente se encuentra el IES Alexandre Galí. De planta baja y piso superior, era un edificio aislado con una gran superficie dedicada a huertos de regadío. Tingle vivió allí entre 1946 y 1958, año en que se mudó a Tortosa, justo cuando los primeros roquetencs estaban levantando las primeras casas. En la casa de Les Roquetes vivirá con algunos trabajadores venidos de la zona del Pallars Jussà y que le habían acompañado en la época que vivió en Flix.
Moreno comenzó la investigación en 2016 de forma fortuita; se encontraba realizando un trabajo académico para el Máster de Formación al Profesorado de la Universidad Rovira Virgili en el Archivo Municipal de Sant Pere de Ribes cuando, al consultar unos planos de los años 1960, encontró que había un propietario de tierras roquetenques que tenía nombres y apellidos anglosajones, lo cual le llamó la atención, pues no se tenía noticia de que hubiera ingleses entre los primeros roquetencs. Durante los últimos 4 años Moreno se ha dedicado a rehacer la vida de Michael L. Tingle mediante la investigación en archivos nacionales y extranjeros, en la prensa digitalizada y a la realización de entrevistas orales a personas que conocieron a Tingle.
