Este jueves por la mañana se han puesto en funcionamiento los nuevos semáforos del centro de la ciudad de Tarragona, en el cruce de la avenida Prat de la Riba con las calles Higini Anglès y Pare Palau. La instalación semafórica cuenta con los últimos elementos tecnológicos como son las señales acústicas para personas invidentes y los temporizadores para peatones. Además, conviene resaltar que esta intersección es la última que quedaba sin regular en la zona delimitada por la avenida de Roma, la Rambla Nova y la avenida de Ramón y Cajal.
Dentro de la jerarquización viaria de la ciudad, la avenida de Prat de la Riba está definida como una vía principal o vertebradora con una IMD (intensidad media diaria) de 6.000 vehículos/día y con varios tramos horarios con más de 500 vehículos/hora. Tanto el Servei Català de Trànsit, como el Plan local de seguridad vial de Tarragona, recomiendan que en esta categoría de vía la protección a las personas peatones que tienen que cruzar la calle se realice mediante regulación semafórica.
Los trabajos han tenido una duración aproximada de cuatro semanas y un coste de 46.612,66 euros.