El terrorista herido en la explosión de Alcanar, Mohamed Houli Chemlal, se mostró arrepentido ante el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu y pidió perdón, según confirman fuentes jurídicas. Aprovechó para expresarse en estos términos ante la única pregunta que le hizo su letrado, designado de oficio por la Audiencia Nacional y con el que no tuvo ningún contacto hasta el momento de pasar a disposición judicial.
Houli Chemlal, junto con otro de los terroristas, ha ingresado en la prisión de Alcalá Meco por los delitos de integración en organización terrorista, asesinato y lesiones de carácter terrorista, depósito de explosivos y estragos. Ante el juez Andreu reconoció que hacía dos meses que trabajaban en el atentado, que el imán les había explicado que se quería inmolar y que fabricaban explosivos desde la casa de Alcanar. En la explosión murieron el imán de Ripoll y Youssef Aalla, el hermano de uno de los terroristas abatido en Cambrils. Él se salvó porque estaba en el porche en el momento de los hechos.
Aparte de Houli, también ha ingresado en prisión Driss Oukabir, de 28 años, que alquiló la furgoneta que atropelló y mató a 13 personas en La Rambla (y que conducía Younes Abouyaaqoub).
En cambio, ha salido en libertad provisional -y ya está en Ripoll- Mohamed Aalla, de 27 años. Según el juez, aunque el coche usado por los terroristas en Cambrils va a su nombre, considera que ha quedado acreditado que el verdadero propietario era su hermano Youssef, muerto en la explosión de Alcanar. Otro hermano de Mohamed, Said, murió en el ataque de Cambrils abatido por los Mossos d'Esquadra.
El juez ha prorrogado 72 horas la detención del cuarto detenido, Salh El Karib, propietario de un locutorio en Ripoll y que habría comprado billetes para ir a Marruecos para Driss Oukabir y también para el imán. El juez quiere esperar a que finalicen las diligencias que están en marcha antes de tomar una decisión.