El Puerto de Tarragona ha adjudicado por 4,7 millones de euros, más IVA, las obras de rehabilitación del edificio de oficinas de la antigua sede de la Autoridad Portuaria de Tarragona (APT) a la UTE formada por las empresas COMSA, SAU y Gestión Ingeniería y Construcción de la Costa Dorada (GICSA). Las obras, que se iniciarán en abril, tienen un plazo de 18 meses. La intervención comprende una rehabilitación integral del edificio que, con 4.828 m² construidos, se destinará a uso administrativo y de servicios portuarios.
La rehabilitación y puesta en marcha de este emblemático edificio ha sido un objetivo principal de la Autoridad Portuaria de Tarragona. El bloque quedó vacío en junio de 2010, cuando se trasladaron las oficinas a otro edificio al lado. El antiguo requería una rehabilitación integral para adecuarlo a las nuevas normativas constructivas, de eficiencia energética, habitabilidad, comunicaciones y seguridad.El Puerto de Tarragona comenzó a recuperar en 2013 el antiguo edificio para integrarlo al 'skyline' de Tarragona. Durante estos años se ha trabajado en el proyecto ejecutivo, aprobado definitivamente en 2018, con la adjudicación presupuestaria que permite sacar adelante la rehabilitación. Este proyecto moderniza el edificio pero salvaguarda su esencia arquitectónica.
Después de estudiar diferentes opciones y posibles usos del edificio, se decidió optar por un modelo mixto de uso administrativo y de servicios portuarios. De este modo, los servicios de Port Control, situados en el muelle de Cataluña, se trasladarán a la última planta del edificio, donde también se ubicarán los servicios técnicos y administrativos de Salvamento Marítimo, el área de señales marítimas de la APT y el área administrativa de la Corporación de Prácticos. También habrá salas operativas para Capitanía Marítima y para la Dirección de Operaciones Portuarias y una sala de crisis.
En cuanto al resto de plantas, se prevé acoger oficinas para terceras empresas que estén interesadas en esta ubicación y está previsto destinar dos plantas más para uso de la misma Autoridad Portuaria.
Por último, la planta baja permitirá abrir el edificio a la ciudadanía con servicios de carácter público como una sala de actos y un centro de interpretación del Puerto, que dará a conocer a la sociedad la historia y evolución de la infraestructura portuaria.