Unos 1650 adolescentes de la ciudad participan hoy y mañana en el programa "Cambio de marcha", una actividad educativa que pretende concienciar a los jóvenes de entre 14 y 18 años sobre las causas y las consecuencias de los accidentes de tráfico. El Ayuntamiento de Lleida, a través del departamento de Educación Vial de la Guardia Urbana, colabora con Mutual de Conductores en esta iniciativa, que hace años que se desarrolla en la ciudad y que desde 2014 lo hace con este formato. La teniente de alcalde y concejala de Seguridad Ciudadana y las Políticas para el Civismo, Sara Mestres, ha incidido en que la educación y la prevención son claves para concienciar a los futuros conductores, como los que asisten hoy y mañana a las sesiones organizadas en el Auditorio Municipal Enric Granados de Lleida. Según Mestres, se debe tener en cuenta que el coche es un "medio de transporte que puede matar" y que se debe concienciar a los jóvenes del uso que se debe hacer. Mestres ha hablado de las medidas urbanísticas y viarias que se aplican en la ciudad. Entre otros, los dispositivos de control de seguridad vial, como los radares o semáforos foto-rojos, más zonas 30, etc. Y ha añadido que en lo que llevamos de año han disminuido un 43% los heridos graves en accidentes de tráfico en la ciudad.
Mestres, acompañada del director de Mutual de Conductores, Joan Badenes, y de los representantes de diferentes cuerpos de seguridad, ha puesto de relieve la actividad "Cambio de marcha que fomenta conductas responsables y de autoprotección.
La actividad consiste en la representación de una conversación telefónica entre dos hermanas, una de las cuales presencia un accidente de tráfico cuando se dirige en coche hacia la discoteca y llama a la otra para explicarle la situación. Durante su relato, se intercalan vídeos informativos y testimonios reales de los cuerpos de emergencia que se ocupan de la gestión más inmediata del accidente, así como de víctimas y familiares. El objetivo es que las nuevas generaciones se eduquen en la prevención de la siniestralidad y la adquisición de conductas que les protejan de los peligros en la vía pública y que les hagan responsables.
Después de esta actividad educativa que causa un fuerte impacto a las personas jóvenes asistentes, en Lleida se realiza una actividad complementaria. El Equipo de Educación Vial de la Guardia Urbana y del Área de Promoción de la Salud hacen una sesión en las aulas para reflexionar en torno a la actividad.
El Ayuntamiento colabora con la actividad impulsada por la fundación privada sin ánimo de lucro Mutual de Conductores y que cuenta con el apoyo del Servicio Catalán de Tráfico.