El Ayuntamiento de Torredembarra tendrá un presupuesto de 21,6 millones de euros para este ejercicio 2018. El equipo de gobierno ha presentado este miércoles unas cuentas que incluyen casi un millón de euros para inversiones. El alcalde Eduard Rovira ha explicado que este presupuesto tiene otro cariz respecto a los que presentaron en los dos ejercicios anteriores, sobre todo por la reducción de deuda y porque ya se ha hecho frente a algunas actuaciones urgentes que tenía el consistorio.
Concretamente, la reducción de la deuda por debajo de lo que marca el plan de saneamiento y las inversiones hechas a través del dinero del IVA del 2010 y del remanente de tesorería 2016 permiten ahora al gobierno ser un poco más flexibles con el gasto. Así, Rovira ha comentado que este año se permiten hacer inversiones que provienen de los ingresos corrientes.
Por su parte, el concejal de Hacienda, Josep Maria Guasch, ha calificado este presupuesto como "más atrevido" que los dos anteriores y ha detallado que la revisión del catastro que se ha hecho recientemente permitirá aumentar el capítulo de ingresos corrientes. Después de dos años difíciles por las limitaciones impuestas por el endeudamiento, Guasch cree que ahora se verá que el actual gobierno está "bien encaminado".
En cuanto a las inversiones previstas, más de la mitad -511.000 euros de los 976.000 presupuestados- irán a la concejala de Vía Pública y Mantenimiento. Unos 100.000 euros se dedicarán a diversas actuaciones relacionadas con el alumbrado público y la eficiencia energética. También se prevén 50.000 euros para rebajes en los pasos de peatones, 87.000 para obras en la vía pública o 50.000 para acondicionar la escultura Alfa y Omega, Torredeentre entre otros.
Estas inversiones se deben sumar a las proyectadas el año pasado, muchas de las cuales se materializarán en el presente ejercicio, como por ejemplo el plan de asfaltado, la reforma de la calle Pere Badia o la adecuación del paso superior del Barrio Marítimo. El concejal de Vía Pública y Mantenimiento, Vale Pino, ha asegurado que están "muy emocionados" por todas estas obras, que "cambiarán la realidad de las calles de la Torre". Otra de las prioridades del actual gobierno es avanzar en la implantación de la administración electrónica. Es por eso que en el presupuesto de 2018 se incluyen partidas por un valor total de 230.000 euros para modernizar el equipamiento y el software informático del Ayuntamiento.
Aunque todavía no han querido dar cifras concretas, la previsión es que en 2017 se cierre también con un remanente de tesorería positivo. Esto podría dar pie a dedicar aún más recursos a inversiones o a abrir la partida de los presupuestos participativos. Según las previsiones del gobierno torrenc, el ejercicio 2017 debería cerrarse con un 67% de endeudamiento, siete puntos por debajo de lo que pedía el plan de saneamiento para 2020. Guasch, titular de Hacienda, ha recordado que cuando comenzaron el mandato este porcentaje era del 104%.