El jurado popular declara culpable a Ramon Franch

23 de noviembre de 2017 a las 15:50h

El jurado popular ha declarado a Ramon Franch culpable de la muerte de Carme Gallart, la vecina de Els Pallaresos que desapareció el 18 de junio de 2015. La decisión se tomó por siete votos a favor -de los nueve posibles-, según se ha anunciado este miércoles por la noche en la lectura del veredicto que se ha hecho en la Audiencia de Tarragona. El jurado ha considerado probado que el día de la desaparición de la mujer, de 65 años, el acusado estuvo en Els Pallaresos y no en Tarragona -tal como él sostuvo durante el juicio-, la abordó y puso fin a su vida en un lugar indeterminado. Dos días después, según el tribunal, se deshizo del cadáver de la mujer durante el trayecto que realizó hasta el Prepirineo de Huesca.

El informe de los datos de telefonía realizado por parte de los Mossos d'Esquadra ha sido clave en la justificación del veredicto de culpabilidad. Asimismo, el jurado ha avalado el móvil económico del crimen por el litigio judicial en que la víctima le acusaba de estafa y también ha considerado "decisiva" la carta que Franch envió a una amiga para decirle "qué tenía que declarar". La fiscalía y la acusación particular han solicitado 15 años de prisión por homicidio y, la defensa, la pena mínima de 10 años. A las nueve de la noche de ayer, arrancó la lectura del veredicto del jurado popular, que deliberaba desde el lunes al mediodía en la Audiencia de Tarragona. La vista oral arrancó el 6 de noviembre y, durante varias sesiones, han comparecido en la sala de vistas cerca de un centenar de testigos y peritos. El veredicto de culpabilidad ha salido adelante con el mínimo de votos a favor necesarios, el de siete de los nueve miembros. Además de la existencia de un móvil económico por parte de Ramon Franch y los informes periciales de los mossos sobre geolocalizaciones a partir de la telefonía móvil, el jurado popular argumentó la decisión por varios indicios: la inexistencia de actividad vital de Carme Gallart desde el día de la desaparición, y por los restos biológicos con ADN de la víctima localizadas en el parachoques del vehículo Hyundai Atos, que Franch había pedido a una amiga con la excusa de vigilar a su mujer. Ramon Franch estuvo en Els Pallaresos Por unanimidad del jurado popular quedó probado que Ramon Franch estuvo en Els Pallaresos el 18 de junio de 2015, que abordó a la víctima en un lugar indeterminado y que puso fin a su vida. Posteriormente, por siete votos a favor, consideró demostrado que el acusado introdujo el cadáver de la víctima en el maletero del Hyundai Atos y, finalmente, lo estacionó en el aparcamiento de la Bajada del Toro de Tarragona. Según el jurado, el 20 de junio de 2015, Franch fue hasta el Prepirineo de Huesca con otro de sus vehículos y, en algún lugar de la ruta, se deshizo del cuerpo sin que, hoy en día, haya sido localizado. El tribunal también ha considerado probado que, en mayo, el acusado intentó llegar a un acuerdo extrajudicial con la mujer por el litigio de estafa y le habría ofrecido unos 300.000 euros para que se retirara del proceso. Hay que tener en cuenta que Ramon Franch se enfrentaba a una pena de seis años de prisión y el pago de 1,5 millones de euros por estos hechos, que se tenían que juzgar en septiembre de aquel año. El asunto, sin embargo, se aplazó por la imposibilidad de localizar a la víctima y, hoy en día, todavía está pendiente de juicio. "Franch acabó de forma violenta con Carme Gallart" Según el jurado, Carme Gallart no aceptó la proposición de Franch y, este, se desplazó en una decena de ocasiones a Els Pallaresos para vigilar los movimientos y costumbres de Gallart. Además, ha considerado probado por unanimidad que, durante los desplazamientos, desconectaba los datos de Internet de su teléfono móvil. Según los mossos, Franch adoptó este hábito en varias ocasiones porque creía que, así, no se le podría localizar. Por todo ello, el jurado ha concluido que Franch, mediante un modo no establecido, acabó de forma violenta con Carme Gallart. Durante su veredicto, los ciudadanos que conforman el tribunal no dieron credibilidad a los peritos de telefonía contratados por la defensa porque, según dijeron, cometieron errores de localización de las antenas e hicieron sus mediciones a partir de la cobertura 4G, que no existía en 2015 en la ciudad. Además, el jurado ha considerado "decisiva" la carta que Franch envió a la amiga que le había prestado el coche, en la que le decía "qué tenía que declarar". El jurado ha subrayado que esta testigo la recibió tan solo dos días antes de declarar en el juzgado de instrucción y que él le dijo que "se deshiciera de la prueba". Franch se enfrenta a un máximo de 15 años de prisión por homicidio El jurado, además, descartó, por unanimidad, la posibilidad de que a Franch se le pueda conceder la suspensión o la sustitución de la pena. Tampoco avaló que se pueda beneficiar de un posible indulto parcial, a causa de los "graves perjuicios" y al sufrimiento de la familia de Carme Gallart a raíz de sus acciones. La fiscalía ha mantenido la máxima pena de 15 años de prisión por homicidio y ha incidido en la existencia de "deliberación", en la actuación previa de Franch, en la diferencia de complexión física y edad de la víctima y el acusado, y en el agravante de que no se haya localizado el cadáver. A su vez, la acusación particular, que inicialmente solicitaba 20 años de prisión por asesinato, se ha adherido a la petición del ministerio público. Por su parte, la defensa, que desde el comienzo pedía la absolución, ha solicitado la pena mínima de 10 años de prisión por homicidio después de conocer el veredicto. El letrado defensor, sin embargo, ha manifestado que en el veredicto se han producido contradicciones y cuestiones que han excedido la prueba practicada, pero no ha confirmado si recurrirá la decisión.

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