El nuevo jefe de Bomberos en la Región de Girona, Antoni Rifà, ha alertado del envejecimiento que sufre el cuerpo en la demarcación. Rifà culpa a los años que han pasado sin que se hicieran nuevas contrataciones de personal. De hecho, este 2017 han entrado los primeros 45 bomberos nuevos en la demarcación desde 2009. "Nos ha hecho mucho daño este déficit pero ahora se empieza a corregir", ha señalado. El jefe de Bomberos en Girona espera que el plan estratégico que contempla las contrataciones de cara a los próximos años siga adelante y "no ve ninguna razón" para que se detengan. En relación a la posible agrupación de parques de Bomberos, Rifà ha admitido que "es un tema de debate" pero que ahora mismo "no está sobre la mesa". "Es una decisión que requiere un estudio previo que aún no se ha hecho", ha resaltado.
Los 45 efectivos de los Bomberos de la Generalitat que se han incorporado en la última promoción a los parques gerundenses aún no son suficientes para cubrir las necesidades de toda la región. Por lo menos faltan una veintena, eso es lo que calcula el nuevo jefe del cuerpo en Girona, Antoni Rifà. Por eso, Rifà no contempla que se vuelva a detener la contratación de personal en futuras convocatorias. "No veo que haya ninguna razón para una nueva detención en la contratación. Necesitamos que esto continúe para poder tener un equilibrio en los parques", asegura. Rifà también ha hablado de la posibilidad de agrupar parques de Bomberos. La región de Girona es la que más acumula. En total hay 28, de los cuales diecinueve son profesionales y nueve son parques de Bomberos Voluntarios. El jefe de región ha reconocido que este "es un tema de debate" en los parques pero ha asegurado que ahora mismo "no hay ninguna previsión", si bien cree que "se tendrá que hablar más adelante". En cuanto a la aplicación del artículo 155 y su afectación al día a día de los Bomberos, Rifà explica que en temas de formación "no ha tenido ninguna incidencia", y tampoco se ha notado especialmente a la hora de trabajar. "Nosotros seguimos actuando como hemos hecho hasta ahora, con el material que tenemos", señala. Antoni Rifà sustituyó en noviembre al antiguo Jefe de Región de los Bomberos, Enric Cano, que estuvo once años y medio en el cargo. El nuevo jefe de Bomberos ha explicado que la suya será una línea "continuista" con la de su antecesor y una de sus prioridades será "velar" para que el plan estratégico se cumpla. De hecho, esta no es la primera vez que Rifà ocupa la máxima responsabilidad del cuerpo en Girona. Justo antes de la entrada de Cano él estuvo dos años como jefe de región. Durante los últimos siete años, Rifà ha sido el jefe de la Metropolitana Norte. Poca lluvia En relación a las previsiones que hacen los Bomberos de cara al próximo verano, y con las posibilidades de que se produzca un Gran Incendio Forestal (GIF), Rifà cree que "es muy prematuro" decir qué pasará. Sin embargo, reconoce que la sequía que ha sufrido el país "en ningún caso ayuda". Con todo, el jefe de Bomberos en Girona reconoce que se trata de una región con una "idiosincrasia particular", ya que tiene dos zonas de viento importantes. La parte de la Selva cuando hace poniente, y la "más compleja" la parte del Empordà cuando sopla tramontana. Mejor gestión del territorio Finalmente Rifà también ha valorado la gestión que se hace del territorio y considera que "hace falta una reflexión de la sociedad". En este sentido, recuerda que los bosques "han crecido mucho" en los últimos 50 años y esto obliga a una "responsabilidad mayor". En este aspecto, recuerda que "el abandono de los campos" ha generado un cambio en el territorio y pide "colaboración" por parte de toda la sociedad. Por eso recuerda la importancia de las franjas de autoprotección. Un aspecto en el que la región de la que se ha hecho cargo es una de las pioneras, ya que casi el 90% de los pueblos las tienen a punto o bien en estudio.