El pasado sábado día 7 saltaba la noticia de la agresión a un hombre en la Part Alta por parte de un grupo de jóvenes. La víctima fue acorralada en el portal de Sant Antoni cuando salía de trabajar y recibió golpes y escupitajos, según él, por parte de 8 jóvenes de origen marroquí que lo insultaban sin motivo y alguno de ellos en estado ebrio.
La víctima, al recibir el primer escupitajo, se dirigió a los agresores diciéndoles que fueran más cívicos y no lo molestaran, pero cuando uno de ellos lo agarró de la chaqueta, él se defendió y todo el grupo se unió. El hombre menciona que "me defendí de los cuatro primeros golpes, pero empezaron a lanzarme piedras y cuando intentaba escapar caí. Fue entonces cuando me llenaron a patadas y puñetazos", concluye. Seguidamente escapó y pidió ayuda a un vehículo cercano, el cual se negó argumentado que "no puedo ayudarlo, me pueden romper el coche".
Los "geganters" (personas que portan los gigantes) del Passeig Torroja, que fueron testigos de la agresión, llamaron a la policía, aunque una ambulancia llegó antes y se llevó al hombre al hospital.
El agredido denuncia que no recibió ningún tipo de ayuda por parte de los allí presentes porque los "geganters" mencionaban que había menores y no podían atenderlo. Los agresores empujaron a la víctima hasta el gigante Egipci y éste se manchó de sangre mientras los "geganters" gritaban "¡se ha manchado de sangre!", explica la víctima. Al caer el hombre al suelo los asaltantes se dispersaron y una ciudadana que paseaba por los alrededores grabó los hechos.
Según relata la víctima "la colla gegantera en ningún momento se acercó para ayudarme, al contrario, cogieron al gigante y se marcharon excusándose que iban con niños".
Los Mossos continúan investigando los hechos y a los autores de la agresión en un momento en que los habitantes de la Part Alta de Tarragona vuelven a denunciar la inseguridad que viven cada día.
