El Futsal Lleida Lo Caragol se proclama campeón de la Tercera División Nacional y logra el ansiado ascenso a 2ª División B Nacional al derrotar al Sant Julià con un 5 a 3. El partido, disputado en un pabellón municipal de Magraners abarrotado, ha permitido poner la guinda a una magnífica temporada a falta de un partido para cerrar la competición.
El equipo leridano se ha mantenido al frente de la tabla clasificatoria a lo largo de toda la competición, acumulando un total de 21 partidos ganados, 3 empates y únicamente 3 derrotas. En cierto modo, la celebración comenzó antes de iniciar el partido con la entrega de veinte camisetas que el club había sorteado entre los aficionados la semana antes. Al final del partido se desplegaba la euforia tanto de los miembros del club como de los espectadores. La celebración tuvo lugar en el mismo pabellón y fuera de éste, con una rúa por el barrio de los Magraners.
Hace apenas diez años, en 2008, el club Futsal Lleida Lo Caragol iniciaba su aventura en las categorías inferiores de un deporte con tanta tradición en la ciudad como es el fútbol sala, dibujando una trayectoria ascendente que les ha hecho pasar de la Segunda División Catalana hasta la Segunda División B Nacional. Al inicio de temporada, La Ciutat de Lleida habló con Macià Exposito, director deportivo, Valentí Cunill, coordinador y entrenador del primer equipo, y Ruben Narbona, responsable de comunicación. Éstos nos trasladaban los objetivos marcados por el club para la temporada 2017-2018, y se muestran orgullosos de haberlos alcanzado, especialmente como campeones de liga. El ansiado ascenso no se ha hecho esperar y consideran que éste supone un premio "porque están trabajando muy bien y con los pies en la tierra". En este sentido, Exposito, Cunill y Narbona afirman que este ascenso contribuye positivamente a la situación del fútbol sala leridano. Valoran que este hecho histórico contribuye, deportivamente hablando, a que Lleida sume renombre en Cataluña, a la creación de nuevos equipos de base y que, en definitiva, "permita que el fútbol sala crezca hasta el punto de que los equipos y la competición puedan alcanzar su máximo nivel".
