El estanque de Ivars y Vila-sana muestra síntomas ''de agotamiento y pérdida de valor ecológico''

01 de febrero de 2018 a las 16:22h
El estanque de Ivars y Vila-sana (Pla d'Urgell) muestra síntomas ''de agotamiento y pérdida de valor ecológico'' después de la rápida recolonización de especies que hubo en los primeros años de este espacio natural recuperado. Según la Institución para el Estudio, Gestión y Recuperación de los Ecosistemas Lerdanos (Egrell), en los últimos años cuatro especies reproductoras han desaparecido del estanque: el Zampullín Cuellinegro, el Fumarel Cariblanco, la Gaviota Reidora y la Gaviota Cabecinegra. Según Joan Estrada, presidente de la entidad, esto no quiere decir que estas especies, que son vulnerables y algunas en peligro de extinción, se vean a veces en el estanque pero sí que han dejado de usar el espacio como lugar de reproducción. Desde Egrell se apunta a la crisis económica como uno de los factores que ha provocado este deterioro de la calidad ambiental del estanque y han hecho un llamamiento a las administraciones para que vuelvan a invertir en la gestión activa del espacio ''ya que solo no funciona''.
Los síntomas ''de agotamiento y pérdida de valor ecológico'' en el estanque de Ivars y Vila-sana se pueden ver en la evolución de las especies reproductoras o las especies más sensibles como la focha, según Egrell. En este sentido, aseguran que algunas de las más abundantes o en progresión son ''poco'' acuáticas y que dependen de medios como los vertederos, como el caso de la gaviota argéntea y la cigüeña. Precisamente muy cerca del estanque se encuentra el vertedero comarcal de Castellnou de Seana, punto de dependencia de muchas de las aves. Joan Estrada ha explicado que debido a la crisis económica han disminuido los recursos para realizar seguimientos precisos del estado del estanque. Ha puesto como ejemplo los que se hacían desde la Universidad de Lleida sobre el agua, que ya no se hacen, de manera que ''no hay información sobre la calidad y la presencia de macrófitos''. La introducción de la carpa en los primeros años de la recuperación del estanque ha provocado que hayan desaparecido buena parte de estos macrófitos y también que el agua se haya enturbiado. Esto es lo que se supone que habría provocado que algunas especies que se alimentan de esta vegetación se hayan marchado, como el fumarel y los zampullines negros o la rarificación de la focha. Tampoco existe un control sobre el tamaño que hacen los peces y si son óptimos para el consumo de determinadas aves. Por otra parte, Estrada ha lamentado que no se esté haciendo ningún seguimiento sobre la presencia de la Nutria en el estanque después de ser detectada hace unos años. Según Egrell, la desaparición de especies reproductoras en el estanque de Ivars y Vila-sana se ha ido produciendo desde el año 2014. Sin embargo, sigue siendo una de las principales zonas húmedas de Cataluña y ella sola acoge el 30% de la población de patos, zampullines y fochas de la llanura de Lleida en invierno. Desde que en 2005 volvió a empezar a entrar agua en la cubeta del estanque se han detectado 256 especies de aves diferentes, de las cuales 117 están ligadas a los medios acuáticos, 31 de ellas con reproducción probable o segura. En 2017 se han detectado 5 especies nuevas en el estanque, 2 de ellas acuáticas, una parcialmente dependiente de cañaveral y dos forestales. De las 5 sólo una de las características de los medios forestales es posiblemente reproductora. Asimismo, el año pasado hay indicios de que criaron en el estanque 15 especies acuáticas. Egrell sin embargo, remarca que ésta no es una buena cifra por el empobrecimiento de especies acuáticas detectado en los últimos tres años.