La Agencia de Protección de la Salud de Cataluña ha concluido que el brote leve que sufrieron 44 niños de Calafell (Baix Penedès) fue causado por la comida en mal estado que les habían servido en las cuatro escuelas infantiles municipales. Los hechos ocurrieron el 2 de noviembre, cuando horas después de almorzar un grupo de niños de menos de un año de edad presentó erupciones en los labios y en zonas de la cara cercanas a la boca. El estudio ha determinado que en las muestras de la comida de aquel día analizadas se han identificado trazas de un compuesto orgánico que puede provocar reacciones alérgicas. El Ayuntamiento de Calafell ha abierto un expediente a la empresa prestadora del servicio, Àgora Catering, y desde este viernes la comida la lleva otra compañía.
Según ha explicado el consistorio, el informe concluye que el compuesto orgánico localizado son aminas biogénicas y que se encontraron en niveles muy bajos tanto en el primer plato -crema de verduras- como en el segundo -pechuga de pollo-. La comida se sirvió en las cuatro escuelas infantiles municipales, pero la afectación solo fue en los niños más pequeños. Hasta 60 menores fueron al centro médico, aunque de casos confirmados únicamente hay 44. Según han apuntado fuentes municipales, los dieciséis restantes habrían estado afectados por un episodio de gastroenteritis que no tendría relación con estos alimentos. Todos los cuadros médicos resultaron leves y ninguno requirió ingreso hospitalario.
Desde el consistorio han explicado que hasta ahora estaban muy contentos con el servicio prestado por Àgora Catering, que ganó un concurso público. A raíz del episodio le han abierto un expediente que determinará si se le aplica una sanción económica o la rescisión del contrato. De momento, y para garantizar la tranquilidad de las familias, desde este viernes el catering lo suministrará otra empresa especializada. El Ayuntamiento también ha destacado que durante todo este tiempo se ha informado puntualmente a las familias de la problemática y su evolución.
