El Arzobispado de Tarragona ha hecho pública esta tarde una nota de prensa que quiere rebatir la información publicada en el digital Directa.cat, y que ha servido para una denuncia de la CUP en rueda de prensa. Los miembros del partido anticapitalista han expuesto ante los periodistas que los servicios sociales derivan a mujeres embarazadas en riesgo de exclusión social a un proyecto "antiavortista" del Arzobispado de Tarragona.
Ante estas críticas, la nota de respuesta afirma lo siguiente:
Que el Hogar Natalis no es un centro antiabortista sino un centro abierto a la vida que acoge a madres gestantes que, por su precaria situación social, familiar y económica se encuentran en una situación de exclusión social. Es un centro reconocido oficialmente por la Generalitat de Cataluña que cumple con todos los requisitos legales que exige la administración.
Que la principal fuente de recursos del Hogar proviene de donaciones de particulares.
Que el equipo actual del Hogar Natalis, renovado en 2015, está integrado por profesionales de la salud pública, voluntarios laicos y religiosas. El centro no está gestionado por ninguna orden religiosa ultracatólica como destaca la noticia.
Que el Hogar Natalis acoge a todo el mundo sin hacer ningún tipo de distinción. Lo corrobora el hecho de que la mayoría de mujeres acogidas no confiesan la religión católica.
Que toda mujer acogida es derivada a través de los Servicios Sociales y, en todo momento, tiene la máxima libertad para decidir si quiere, o no, permanecer en el Hogar.
Que la grabación de la llamada telefónica por parte de una supuesta joven se realizó sin ningún consentimiento ni previo aviso.