Por quinto año consecutivo y fiel a su compromiso de mejorar la calidad de vida de las personas mediante el descanso, la empresa Dormity con la colaboración de la Dra. Odile Romero, jefa de la Unidad del Sueño del Hospital de la Vall d'Hebron, ha llevado a cabo el Estudio Dormity PSQI que permite conocer la calidad del sueño de los catalanes.
Este estudio se elabora a partir del cuestionario clínico internacional de Pittsburgh, que analiza siete componentes referentes al sueño (calidad subjetiva, latencia, duración, perturbación, eficiencia, uso de medicación hipnótica y disfunción diurna) para determinar el Índice de Calidad de Sueño (PSQI ) de las personas.
Según la Dra. Romero, aún se percibe una falta de interés en la gente por adquirir hábitos de sueño saludables. Si bien ha aumentado la preocupación por el descanso, porque la media de horas de permanencia en la cama es de 8h 10m, la eficiencia del sueño aún no es suficientemente buena: las mujeres duermen de media 6h 19m y los hombres 6h 39m.
La realidad muestra que seguimos estando muy lejos de los estándares europeos en cuanto a horarios. En Cataluña, la hora habitual de ir a dormir es entre las 23 y las 00:59h, el 24,5% lo hace de 23h a 23:59h y el 43% de los catalanes (43% de los tarraconenses) se va a dormir pasada la medianoche.
Según situación laboral, los grupos poblacionales que duermen mejor son los trabajadores autónomos sin asalariados, los estudiantes y los trabajadores por cuenta ajena. Los profesionales con personas asalariadas a su cargo es el segmento poblacional que pasa menos tiempo en la cama y que duerme menos horas.
Un 42,5% de los tarraconenses se levanta entre las 7 y las 7:59h de la mañana, un 25% entre las 6 y las 6:59; un 10% más lo hace entre las 6 y las 6:59h; y el resto se levanta más tarde de las 8h.
Otra conclusión del estudio es que en poblaciones de más de 100.000 habitantes, un 9% se va a dormir después de las 2 de la madrugada, mientras que en poblaciones inferiores, este porcentaje se reduce al 1%.
Atendiendo a los 7 componentes del Estudio Dormity PSQI, se observa que: Sobre la latencia, el estudio indica que la media de tiempo en dormirse es de 20 minutos. El 14% de los tarraconenses tarda más de 30 minutos en dormirse, según la Dra. Romero, "menos de 30 min está dentro de la normalidad; por encima de este tiempo hay que revisar higienes del sueño o consultar con un especialista."
En cambio, sigue aumentando el uso de medicación hipnótica: el 5% de los tarraconenses ha declarado tomar 3 o más veces por semana algún tipo de tratamiento hipnótico para dormir. "La medicación hipnótica no puede sustituir en ningún caso unos buenos hábitos de sueño saludables", enfatiza la Dra. Romero.
La calidad subjetiva del sueño es bastante buena para más de la mitad de la población (54%), muy buena para el 30% y mala y muy mala para el 16%.
En cuanto a la duración del sueño: el 60% de los tarraconenses duerme entre 6 y 7 horas. Según la Dra. Romero, "tenemos que adaptar nuestros compromisos sociales y rutinas diarias a unos buenos hábitos de higiene del sueño, y no al revés."
La eficiencia del sueño está por debajo del año pasado: si la media óptima de eficiencia es el 85%, este año el promedio ha sido de 83%. En concreto, un 64% de la población está en el 85%; un 34% de los tarraconenses está por debajo del umbral favorable.
El 66% de la población ha afirmado que no ve afectadas sus facultades durante el día a causa del sueño, y un 34% de los tarraconenses ha señalado tener alguna disfunción diurna relacionada con el sueño.
Por último, el 91% de los tarraconenses ha declarado tener perturbaciones del sueño. Las razones principales de perturbación sigue tener niños pequeños), por estrés, fatiga o tensión nerviosa y por ruidos externos.
Como conclusiones generales del V Estudio Dormity PSQI, la Dra. Odile Romero insiste en que "las personas descuidamos mucho la higiene del sueño, y preferimos tomar un fármaco antes que revisar nuestros hábitos e intentar mejorarlos." Una vez más, la Dra. Romero ha alertado de la gran variedad de riesgos para la salud que supone la falta de un buen descanso, tales como riesgo cardiovascular, tendencia a la depresión, mayor propensión a la diabetes y la obesidad, entre otros.