Los Mossos d'Esquadra han detenido a tres jóvenes por robar a unos turistas mientras se bañaban de madrugada en la Cala Banys de Lloret de Mar (Selva). Los detenidos, tres alemanes de 18 años, aprovecharon que las víctimas estaban en el mar para tomarles las pertenencias que habían dejado en la arena. Cuando el grupo de turistas vio que les estaban robando, salieron del agua y se pusieron a perseguir a los ladrones. Entonces, los tres jóvenes, que se habían deshecho del botín lanzándolo por un acantilado, amenazaron a las víctimas con una navaja. Fue entonces cuando una patrulla de paisano de los Mossos, que lo había presenciado todo, les detuvo. La policía pudo recuperar las pertenencias de las víctimas y, cuando registró a los ladrones, encima les encontraron dos móviles de dudosa procedencia (que también se investiga si eran robados).
El robo que la patrulla de los Mossos pudo frustrar tuvo lugar la madrugada del viernes pasado. Hacia las tres de la noche, los agentes estaban haciendo patrullaje por la zona de Cala Banys, donde había un grupo de turistas que se estaban bañando. Poco después, los policías de paisano vieron cómo tres individuos aprovechaban la ocasión para robarles las pertenencias, que los turistas habían dejado en la arena antes de meterse en el agua. Cuando el grupo de bañistas se dio cuenta de que les estaban robando, salieron del mar y se pusieron a perseguir a los ladrones. Entonces, los tres alemanes les amenazaron con una navaja. Mientras esgrimían el arma, los Mossos interceptaron a los ladrones y les detuvieron. Eran tres jóvenes alemanes de 18 años, sin domicilio conocido, a quienes se imputa un delito de robo con violencia e intimidación. Antes de encararse con las víctimas, los ladrones aún tuvieron tiempo de deshacerse del botín lanzándolo por un acantilado que da al mar. Los agentes, sin embargo, pudieron recuperar las pertenencias y devolverlas a los turistas. Entre lo que les habían robado había ropa, zapatos, un bolso de mano y dos teléfonos móviles de alta gama. Los Mossos registraron a los detenidos y, encima, les encontraron otra navaja y dos teléfonos móviles de dudosa procedencia. Por eso, la policía investiga si también los podrían haber robado. Los tres alemanes, ninguno de los cuales tiene antecedentes, pasaron el lunes a disposición del juzgado de instrucción en funciones de guardia de Blanes (Selva). Después de prestar declaración, quedaron en libertad provisional.