Los Mossos d'Esquadra han desarticulado una organización criminal dedicada a cometer robos violentos a personas mayores en diferentes municipios catalanes y del resto del Estado. Hay dieciséis personas detenidas, de entre 20 y 36 años y de nacionalidad rumana, de las cuales catorce ya han ingresado en prisión. Abordaban a las víctimas en plena calle para robarles relojes, cadenas o joyas. Se les acusa de los delitos de blanqueo de capitales, falsedad documental, usurpación del estado civil y tráfico de drogas. Los detenidos obtenían unos beneficios anuales de hasta 200.000 euros. La investigación se ha saldado con siete registros en domicilios de Barcelona, Badalona y Santa Coloma de Gramenet, y se han recuperado 21 relojes, ocho vehículos, joyas, diamantes, balanzas de precisión, documentos falsos, 4.400 euros en efectivo además de un kilo de hachís.
Los detenidos constituían una estructura totalmente jerarquizada en la que cada uno tenía un papel determinado. Por un lado, los hombres de la organización se encargaban de trasladar a las mujeres hasta los puntos de la ciudad donde es habitual encontrar a personas mayores a primera hora de la mañana. Una vez allí, las mujeres interactuaban ofreciéndoles favores sexuales o de servicio doméstico como maniobra de distracción y en ese momento aprovechaban la confusión generada para sustraerles objetos personales como relojes, cadenas y joyas. Se ha podido comprobar que cada equipo de trabajo podía obtener unos 1.000 euros al día y que los beneficios anuales se situaban cerca de los 200.000 euros.
Por otro lado, los líderes de la organización se encargaban de la gestión de los vehículos que ponían a nombre de testaferros con el objetivo de evitar que los identificaran o los relacionaran con los robos, además de vender el oro sustraído mediante una red de receptores. La investigación ha permitido contrastar que uno de estos receptores compraba estas joyas por el valor de su peso en oro y pagaba un precio por encima del mercado. De esta manera, conseguía blanquear dinero del tráfico de drogas.
Una investigación paralela por parte de la misma unidad ha destapado una trama de blanqueo de capitales basada en el envío de dinero al extranjero ya que estas personas acumulaban antecedentes por los mismos hechos en Alemania, Bélgica, Francia y Holanda, además de tener una gran movilidad en el conjunto del estado español donde pasaban días -incluso semanas enteras- en la Comunidad Valenciana y en Andalucía.
Esta primera fase de la investigación se ha saldado con siete registros en domicilios de Barcelona, Badalona y Santa Coloma de Gramenet, la recuperación de 21 relojes de diferentes valores, ocho vehículos, joyas, diamantes, balanzas de precisión, documentos falsos que utilizaban para poner a nombre de los testaferros los vehículos y seguros, 4.400 euros en efectivo además de un kilogramo de hachís. Se ha podido constatar la participación de personas de la organización en una treintena de hechos ocurridos durante el transcurso de la investigación.
Catorce de los diecisiete detenidos, que no habían estado nunca en centros penitenciarios a pesar de acumular más de un centenar de antecedentes, han ingresado en prisión por orden del Juzgado de Instrucción número 5 de Barcelona y la unidad policial no descarta más detenciones en los próximos días o en una segunda fase de la investigación.