Los Mossos d'Esquadra detuvieron este jueves a tres hombres y una mujer de entre 34 y 38 años en Barcelona y Badalona como presuntos autores de varios delitos de robo y estafa en domicilios de personas de edad avanzada haciéndose pasar por falsos operarios del gas. Se les relaciona con 21 acciones en la ciudad de Barcelona y se les imputan delitos de robos, estafas leves y agravadas, delitos leves de hurto, falsificación de documento mercantil y pertenencia a grupo criminal. Los arrestados actuaban de forma coordinada para engañar a las víctimas, que vivían solas y en ocasiones sufrían patologías cognitivas como Alzheimer o Parkinson, y se llevaban objetos de valor, sobre todo joyas y dinero. Los cuatro detenidos pasaron a disposición judicial este sábado y uno de ellos ingresó en prisión, mientras que los otros quedaron en libertad con cargos.
Los integrantes de este grupo actuaban siempre de la misma manera y se repartían los roles delictivos. La mujer arrestada hacía funciones de operadora telefónica y concertaba las citas simulando que trabajaba para alguna empresa de suministros que quería hacer una revisión de mantenimiento periódica. El día de la visita se desplazaban al domicilio de la víctima dos o tres de los miembros del grupo, uno de los cuales se quedaba fuera con un vehículo. Para no despertar ninguna sospecha, llevaban ropa de trabajo con logos y emblemas propios de las empresas de suministros y subían al piso de la víctima. A veces actuaban dos de los detenidos y en otras uno solo. En el primer caso, uno de ellos aprovechaba para distraer a la persona mientras el otro recorría el piso para encontrar dinero u objetos de valor. Mientras tanto el otro hacía la supuesta revisión y, en ocasiones, fingía que había una avería haciendo un pequeño dispositivo con temporizador detrás del calentador que emitía un ruido acústico. Así se producía a la vez la estafa por una falsa revisión y el robo. Cuando actuaba una sola persona, seguía el mismo patrón, y en caso de que la víctima mostrara alguna duda o resistencia, no dudaba en intimidarla para conseguir su objetivo. La investigación ha acreditado que el grupo había consumado 21 hechos delictivos: dos robos con intimidación, cuatro hurtos agravados, dos estafas agravadas, seis estafas leves, cuatro falsificaciones de documento mercantil, un delito de pertenencia a grupo criminal y un delito leve de hurto. Durante las detenciones, los agentes localizaron 240 euros en efectivo, joyas, teléfonos móviles, cámaras fotográficas procedentes de los delitos, además de tarjetas de prepago, documentación diversa con datos de las víctimas, un ordenador portátil, un arma de fuego con munición del calibre 22, abundante ropa con logos de empresas suministradoras del gas y maletines con kits de falso operario.
ACN
