Los Mossos d'Esquadra han desarticulado un laboratorio de falsificación de billetes de cincuenta euros ubicado en un domicilio de Granollers y han detenido a cinco personas, cuatro hombres y una mujer, de edades comprendidas entre los 40 y los 59 años. A tres de ellos se les acusa de colocar dinero falso haciendo compras en casetas de la ONCE y en pequeños comercios de Cataluña. El centro de producción de billetes fraudulentos estaba situado en Granollers, en el domicilio del falsificador, de 59 años y de nacionalidad española. El hombre, que tiene grandes conocimientos informáticos, ya fue detenido en los años 1997, 2000, 2016 y 2017 por falsificación de billetes. El dinero lo producía artesanalmente bajo demanda. Los detenidos pasaron a disposición judicial el 22 de septiembre de 2017 y la jueza decretó el ingreso en prisión del falsificador y libertad con cargos para los otros cuatro.
Los billetes falsos eran introducidos en el circuito financiero mediante el sistema del goteo: a través de compras de productos de poco valor en pequeños comercios, preferentemente a los vendedores de las casetas de la ONCE ya que imitaban las marcas táctiles de los billetes legítimos y que los invidentes utilizan para identificar los billetes.
La investigación policial se puso en marcha a finales de julio, cuando se detectó un incremento de las denuncias relacionadas con billetes falsos de 50 euros que tenían características de falsificación similares al dinero realizado por el falsificador en los años 2016 y 2017, cuando ya fue detenido por los mismos investigadores en dos operaciones, y coincidieron con la salida de la prisión en libertad provisional.
La operación policial terminó el 19 de septiembre, cuando los investigadores seguían en Granollers a uno de los colocadores de dinero falso que tenía que reunirse con el falsificador, que le entregó un billete para que lo hiciera llegar a un comprador para que comprobara la calidad. Gracias a esto, los mossos pudieron detener a cinco personas, entre ellas una mujer de Girona que introducía los billetes a través de compras de productos de poco valor.
La investigación estuvo dirigida por el Juzgado de Instrucción número 3 de Granollers, y en la entrada y registro practicada en el laboratorio de falsificación en Granollers los investigadores decomisaron billetes falsos de 50 euros, impresiones de billetes del mismo importe que se estaban elaborando, hologramas y papel para falsificar hasta 75.000 euros, un equipo multifunción, impresoras y plantillas para cambiar las numeraciones de los billetes falsificados.
Los detenidos pasaron a disposición judicial el 22 de septiembre de 2017 y la jueza decretó el ingreso en prisión del falsificador y libertad con cargos para los otros cuatro.
Los investigadores recomiendan que los comerciantes y ciudadanos comprueben los billetes utilizando las recomendaciones del Banco Central Europeo "Toque, mire y gire".