El Gobierno se ha comprometido a convocar cien plazas para el Cuerpo de Agentes Rurales durante los próximos tres años, cincuenta en la categoría de subinspector y las otras cincuenta para agentes de escala básica. El anuncio se publicó el jueves en el DOGC junto con el resto de plazas de la oferta de empleo público de la Generalitat aprobada el 18 de abril, y que en total son más de 7.700. Hacía casi una década que no se convocaban plazas nuevas para el cuerpo y la Asociación Profesional de Agentes Rurales de Cataluña (ASPARC) vincula que se haga ahora a las carencias denunciadas a raíz del crimen de Aspa (Segrià) en el que murieron dos agentes por los disparos de un cazador.
A pesar de valorar satisfactoriamente que el Gobierno haya "puesto el foco" en los Agentes Rurales, la Asociación considera "totalmente insuficientes" las cincuenta plazas de la escala básica. Su presidente, Francesc Coll, asegura que la plantilla -que ahora no llega a los 500 agentes- prácticamente debería doblarse para poder cubrir las múltiples tareas que tienen asignadas para la protección del medio ambiente. En cambio, ve "necesario y del todo positivo" que el Gobierno contemple ampliar con medio centenar de plazas más la categoría de subinspector. "Hacía diez años que lo esperábamos porque hace mucha falta incrementar la capacidad técnica, de coordinación y de organización de los cargos de mando del cuerpo", afirma.
"Estas convocatorias parecían imposibles hasta el día 20 de enero, hasta el día antes de que mataran a los dos compañeros", afirma Francesc Coll, que atribuye al crimen el hecho de que ahora el Gobierno haya "puesto el foco" en el cuerpo de Agentes Rurales. "El asesinato ha sacado a la luz un cuerpo que ha sido poco valorado y poco apoyado por la propia Generalitat; se han puesto de manifiesto las graves carencias de organización, de coordinación, de estructura y de plantilla que tiene el cuerpo después de diez años absolutamente parado en cuanto a la incorporación de personal mientras ha tenido que ir asumiendo cada vez más funciones y más tareas", insiste. Por eso, confía en que "este anuncio sea el inicio de una mejora a todos los niveles". En todo caso, el presidente de la Asociación Profesional de Agentes Rurales de Cataluña matiza la valoración de la convocatoria según si se trata de los subinspectores o de los agentes de escala básica. En el caso de los mandos, considera muy positiva la cifra de las cincuenta plazas anunciadas y confía en que se convoquen lo antes posible en los próximos meses. En cambio, Coll asegura de forma contundente que "prever cincuenta plazas de agente rural de escala básica a tres años vista es absolutamente insuficiente". Además, puntualiza que la administración aún no ha aclarado "si serán plazas realmente de nueva creación que supongan un incremento real de la plantilla o sólo la reposición de los puestos de trabajo que ahora están vacíos por jubilación o muerte de compañeros". Además, recuerda que el Plan Estratégico para el Cuerpo de Agentes Rurales que está elaborando la Generalitat ya prevé que la plantilla se incremente del medio millar de efectivos que hay actualmente hasta cerca de 900 en cinco años, por lo tanto, las cincuenta plazas que se anuncian ahora en un plazo de tres años se quedarían muy cortas para alcanzar este objetivo. Nuevas declaraciones en el juzgado Por otra parte, este lunes habrá nuevas comparecencias en el juzgado de Lleida que lleva el caso del crimen de Aspa. Por segunda vez prestará declaración un cazador que estaba en la zona el día de los hechos y que puede aportar nueva información. Según el abogado de las familias que ejerce de acusación particular, Pau Simarro, el objetivo es determinar si el autor confeso de los disparos, Ismael Rodríguez, estaba solo o no en el momento de los hechos. También declarará un posible nuevo testigo, un hombre que figuraba en la acreditación del coto de un compañero de caza de Rodríguez.
