Las obras para reabrir el vial de acceso a Sant Boi de Llobregat desde la carretera comarcal C-245 han comenzado este viernes. Según el Ayuntamiento, el Ministerio de Fomento ha iniciado los trabajos necesarios para recuperar la situación inicial del vial de acceso al núcleo urbano, tal y como habían reclamado los municipios afectados por las obras de construcción de la variante de la carretera. Los ayuntamientos de Sant Boi, Santa Coloma de Cervelló, Sant Vicenç dels Horts y Torrelles de Llobregat, junto con la Diputación de Barcelona y la Generalitat, han reivindicado durante meses al Ministerio de Fomento soluciones para evitar las colas y molestias circulatorias que provoca la interrupción de las obras de la variante y el consiguiente corte continuado del vial.
Las obras de la variante de la C-245, que conectan la ronda del Litoral y la autopista C-32, hace más de dos años que están paradas por diferentes problemas administrativos y presupuestarios. El último obstáculo, explican en un comunicado los ayuntamientos, fue la entrada en situación de concurso de acreedores de la empresa adjudicataria, Isolux-Corsán, que impide la reanudación de los trabajos a corto plazo porque será necesario iniciar una nueva licitación. Ante esta situación, el pasado julio los municipios afectados, la Diputación de Barcelona y la Generalitat entregaron al ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, una carta reivindicativa conjunta que exigía la reapertura del vial de acceso a Sant Boi antes del inicio del curso escolar para poder recuperar la situación inicial a la espera de que las obras de la variante se puedan reanudar. "Después de muchas conversaciones telefónicas, reuniones y reivindicaciones institucionales, los trabajos para la reapertura del vial se han iniciado esta tercera semana de octubre", han añadido.
Según el Ministerio de Fomento, la obra implicará la demolición de un muro provisional en el lateral de la carretera y la excavación del terreno para encajar el nuevo ramal y eliminar el desnivel existente, y finalizará con la pavimentación de la conexión de la carretera con el vial de acceso al núcleo urbano. De acuerdo con los planes ministeriales, las obras durarán un máximo de dos meses y tendrán una incidencia mínima y puntual en la circulación de vehículos. El vial debería poder reabrirse al tráfico hacia mediados del mes de diciembre.
Otra de las peticiones de los municipios y que aún está pendiente por parte de Fomento, según han indicado, es conocer el programa de actuación y un calendario sobre el nuevo proceso de licitación de la variante. "Una infraestructura que ha sufrido, ya desde los Juegos Olímpicos de Barcelona, décadas de retrasos, incidencias y paralizaciones", han lamentado los ayuntamientos. Mientras tanto, el Ministerio de Fomento y la Diputación de Barcelona trabajan para firmar un convenio que permita la ejecución, por un lado, del proyecto de desdoblamiento del ramal de conexión entre la BV-2002 y la A2 y, por otro, la ampliación y mejora de la rotonda de Sant Vicenç dels Horts, que conecta con estas dos infraestructuras y con la B-23. Los municipios han indicado que estas dos actuaciones se debían hacer una vez finalizadas las obras de la variante, y su realización previa se valora como "la solución óptima para la movilidad del entorno".