El portavoz político de Demócratas, Antoni Castellà, ha defendido que haya una ley "exclusiva" para el referéndum, separada de la Ley de transitoriedad jurídica. En una entrevista, el también diputado de Junts pel Sí ha expresado que esta normativa para la votación debe ampararse "en la legalidad internacional". Para Castellà, hay que aprovechar que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y diversos tratados internacionales reconocen el derecho a la autodeterminación. Tal y como ha afirmado el portavoz de Demócratas, el Estado ha "suscrito" estos tratados, de manera que "forman parte del cuerpo jurídico constitucional español". Por otra parte, Castellà ha asegurado que el gobierno español sólo podrá evitar el referéndum si hace uso de la fuerza, un escenario que provocaría entrar en terreno "desconocido".
Castellà ha insistido en que todos los tratados internacionales que ha firmado el Estado reconocen el derecho a la autodeterminación hacen que, para Demócratas, "existe toda la legitimidad de amparar un referéndum directamente en la legalidad internacional". Así pues, para Castellà el referéndum tendrá cobertura legal amparándose en la carta de la ONU y en el resto del derecho internacional. Además, el diputado de JxSí cree que "no tendría mucho sentido" aprobar la Ley de transitoriedad antes de la celebración del referéndum. Para Castellà, el marco legal que debe sustituir al español debe llegar después de la votación, y en caso de que gane el 'sí'. De hecho, el jefe de filas de Demócratas opina que si la Ley de transitoriedad se aprueba antes del referéndum alguien podría decir que el Parlamento "estaría condicionando la campaña". Finalmente, Castellà ha apuntado que la aprobación de la Ley del referéndum debería estar "muy ligada" a la convocatoria de la consulta.
Dardo a Catalunya en Comú
El diputado de JxSí también se ha dirigido al coordinador general de Catalunya en Comú, Xavier Domènech, para asegurar que la decisión sobre si el referéndum es vinculante o no "es de los ciudadanos y no de los comunes". Aún sobre el espacio que representan Domènech y Ada Colau, Castellà ha afirmado que, tras las negativas del Estado a pactar el referéndum, "o alguien tiene información privilegiada sobre un movimiento del PP [para negociar la consulta], o alguien está jugando con un discurso de espera y esperar hasta que algún día manden en el Estado". Es por ello que, para el líder de Demócratas, si los comunes siguen la segunda opción se entenderá que "ejercen el derecho a decidir como una plataforma para alcanzar el poder".
Sin embargo, Castellà se ha mostrado "convencido" de que el electorado y las bases de Catalunya en Comú se sumarán al referéndum, también si se hace sin acuerdo con Madrid. "Imprescindible no es nadie y menos los partidos. Quien es imprescindible sólo son los ciudadanos", ha considerado. En esta línea, el dirigente independentista ha sentenciado que el referéndum tampoco perdería fuerza si la ejecutiva de Catalunya en Comú no se suma. "Una cosa es la dirección y otra las bases", ha opinado Castellà, que se ha mostrado "sorprendido" porque la formación de Colau y Domènech no ha consultado a las bases sobre qué opinan del referéndum unilateral", como sí ha hecho Podemos Catalunya. "Normalmente cuando no quieres consultar es porque piensas que el resultado no te gusta", ha soltado.
En otro sentido, el exsecretario de Universidades e Investigación ha reconocido que el Pacto Nacional por el Referéndum (PNR) "tiene poco sentido", tras la negativa del Estado a negociar la consulta. Sin embargo, Castellà ha propuesto que el Pacto puede continuar vivo, una vez anunciada la fecha y la pregunta, si es para "mantener un espacio de diálogo transversal".
El uso de la fuerza del Estado
En cuanto a la posibilidad de que el Estado utilice la fuerza para detener el referéndum, Castellà ha opinado que, si se llega a este escenario, "no habrá normalidad" y ya no se tratará de hablar de declaración de independencia o de votación. "Entraríamos en lo desconocido", ha añadido. En esta línea, Castellà ha concluido que desde Cataluña se deben poner todos los esfuerzos para llevar a cabo el referéndum, de manera que "la única opción" para que no se celebre es, precisamente, si el Estado utiliza la fuerza. "Cualquier otra es una excusa, por tanto, el referéndum se hará". "Yo pienso que no usará la fuerza, pero no seré tan ingenuo de decir que esto es imposible. Tenemos que estar dispuestos a encajarlo", ha continuado Castellà.
Sobre los posibles escenarios que pueden producirse en los próximos meses, el portavoz político de Demócratas se ha mostrado contundente, y ha asegurado que "no hay excusa" para justificar que el referéndum no se pueda hacer. "Estaríamos haciendo un fraude a la ciudadanía", ha manifestado Castellà, que confía en que tanto el Gobierno como el presidente, Carles Puigdemont, hayan "contemplado" todas las opciones, incluidas las acciones de los Mossos y de los funcionarios. "No me imagino que no se pueda hacer el referéndum por no sé qué concurso, empresa o funcionario. Si esto ocurriera, lo que deberíamos hacer todos es plegar, dimitir e irnos a casa", ha concluido.
Mas y Gabriel juntos
Sobre la campaña conjunta, Castellà ha sentenciado que el expresidente de la Generalitat Artur Mas y la portavoz parlamentaria de la CUP Anna Gabriel "deberían aceptar" estar juntos en un escenario. Para el diputado de JxSí, hay que dejar al margen todas las diferencias que pueda haber dentro del soberanismo, porque "nos estamos jugando algo que trasciende absolutamente de los posicionamientos políticos y las afinidades o no personales". "Es el momento de no pensar en la parte y sí en el todo", ha rematado Castellà, que opina que la campaña unitaria es "imprescindible y necesaria". En cuanto a los actos propios de Demócratas, el líder del partido ha avanzado que en el acto del 17 de junio en Nou Barris se hará un debate con representantes del 'sí' y también del 'no', aunque aún no están cerrados los ponentes. Castellà opina que hay que "dar opciones para que haya espacios del 'no'", a pesar de que los partidos unionistas no trabajen en ello. "Si no se expresan los partidos sí que lo puede hacer gente de la sociedad civil", ha comentado. Por eso Demócratas se ha reunido con cinco entidades del 'no' en los últimos meses.
Por último, el jefe de filas de Demócratas ha dado por "superado" el conflicto con el PDeCAT, después de que los ex convergentes reclamaran el nombre de 'Partido Demócrata'. Finalmente, Castellà opina que las siglas de 'PDeCAT' "es una buena solución".
