El próximo fin de semana Blanes vivirá una de las tradiciones religiosas de la Semana Santa que siempre atrae a una gran cantidad de personas. En esta ocasión, sin embargo, también se ha tenido que adaptar para poder cumplir con las medidas de contención de la pandemia, por lo que la única aparición pública del evento se ha tenido que suspender.
Se trata del Canto del Ángel, que se interpreta como punto culminante de la Procesión del Resucitado que se celebra coincidiendo con el Domingo de Pascua, es decir: que se hubiera celebrado el próximo domingo. La procesión se detiene cuando las dos imágenes que la forman –la Virgen María y el Resucitado- se encuentran después de haber hecho dos recorridos diferentes. Es entonces cuando se interpreta el Canto del Ángel.
Este 2021 sólo se podrá oír el Canto del Ángel en dos ocasiones, y las dos con aforo controlado y restringido, en el interior de la Iglesia Santa María. Será el sábado por la noche, formando parte de la Vigilia Pascual que comienza a las ocho; y al día siguiente domingo, en la Misa de Pascua de las 12 del mediodía.
En los últimos días se han estado haciendo ensayos del canto con las dos personas que se encargan de preparar al/a la cantante: Emili Bitlloch y Salvador Roca. El primero se encarga de la música, y el segundo de indicarle al ángel qué movimiento debe hacer en función del contenido de la letra, que originariamente está escrita en latín, el Regina Coeli, que en catalán significa Reina del Cielo, una composición litúrgica de felicitación a la Virgen María por la resurrección de su hijo Jesucristo.
Una tradición de más de 120 años única en Cataluña
La música del 'Canto del Ángel' data de 1904, y es obra de Mossèn Joan Batlle, quien también es autor del 'Miserere' que se canta en la Procesión de Viernes Santo. Es una de las tradiciones más arraigadas que sigue aún vigente en el municipio donde empieza la Costa Brava. Los blanenses y visitantes que se acercan a oírlo lo aprecian de manera especial porque la interpreta una 'voz blanca', un niño o una niña vestido con una túnica que también incluye varios gestos alusivos al contenido de la letra.
Tiene más de 120 años de antigüedad, y actualmente Blanes es la única localidad de toda Cataluña donde sigue celebrándose el Canto del Ángel y la procesión del Resucitado de Semana Santa que lo envuelve. Su origen se pierde en los principios de los tiempos. En 2019 fue objeto de un cuidadoso trabajo publicado en la revista anual del Archivo Municipal 'Blanda', a cargo de Ma Àngela Sagrera. Una de las partes más interesantes de la investigación fue conocer los nombres de los niños y niñas –hoy padres y madres, e incluso abuelos y abuelas- que en su momento fueron el ángel.
